La huella de Tomás Morales
Murió el 15 de agosto de 1921, de forma repentina, en Las Palmas de Gran Canaria
Las Palmas de Gran Canaria
En la calle Pérez Galdós de Las Palmas de Gran Canaria, entre Triana y el Risco de San Nicolás, en la fachada de una vivienda, una placa recuerda que allí vivió el poeta. Siguiendo la ruta, frente al inicio del Paseo que lleva su nombre, el escaparate del Cabildo lo recuerda y unos metros más allá, caminando hacia el norte, el primero de los institutos luce en su fachada "Poeta Tomás Morales Castellano".
Eso son algunos de los hitos que recuerdan en Las Palmas de Gran Canaria al poeta modernista pero también en otros puntos de Gran Canaria su huella permanece cuando cumplen 100 años de su fallecimiento. Por ejemplo en Moya, su localidad natal, sede de la Casa Museo donde se le homenajeó hace unos días o en Agaete donde vivió y ejerció de médico. Allí en el Huerto de las Flores anoche se recreaba su presencia con amigos como Saulo Torón o Alonso Quesada.
En las redes sociales también se va a perpetuar su memoria ya que alrededor de 40 escritores y artistas han leído fragmentos de su obra literaria. Con sus voces, Tomás Morales recorre de nuevo los caminos que transitaron ya sus versos, ahora con una diversidad enriquecedora, y con ellos se ha conformado un vídeo-libro de ‘Las Rosas de Hércules’.
Este vídeo se publicará de forma fragmentada en las redes sociales de la Casa Museo Tomás Morales. Así, desde el 15 de agosto y hasta el mes de diciembre, en días impares, exceptuando fines de semana y festivos, un poeta recitará unos versos o un poema completo del autor, con lo que su poesía será difundida en este formato digital.