El ribereño que dejó Irlanda para enseñar al mundo lo que nos rodea
Carlo Cuñado, acostumbrado a vivir entre Milagros y Aranda, se encontró solo y sin trabajo con la llegada de la pandemia
Ahora se ha convertido en un comunicador de internet, en el que hace de guía por diversos lugares magníficos y especialmente rurales
Aranda de Duero
"¡Hola a todos! Hoy os traigo a Aranda de Duero, para que os entre el gusanillo y vengáis a visitarnos". En plena época de expansión digital donde plataformas como Youtube o Twitch se han hecho un hueco entre la gente joven o de media edad, tener un embajador que deslice esta invitación ayuda y mucho. Y más, si sabe lo que es echar de menos su tierra. Nuestro invitado se llama Carlo Cuñado -realmente, Carlos Gómez Cuñado- y hace unos meses, tras la pandemia, decidió dar un vuelco a su vida.
"Yo soy una persona más que ha nacido en una tierra muy bonita y de la que está muy orgullosa, que le ha faltado tiempo para valorar lo que tiene, y que muestra con una energía brutal el maravilloso país que tenemos. A mí la pandemia me pilló en Irlanda. Trabajaba allí, en Dublín, y unas semanas antes de la pandemia dejé mi trabajo para viajar a Grecia, Palestina, Israel... y cuando volví a Dublín llegó la pandemia y me vi sin trabajo en un país frío, solo, teniendo lejos a mi familia...", cuenta emocionado. "Y de repente empecé a echar de menos ciertos vídeos que a mí me gustaría ver de mi tierra. No existía un vídeo sobre la iglesia de la Talamanquilla, que a mí me parece la iglesia más bonita del mundo mundial. Y de ahí me lancé. Los vídeos los tenía en mi cabeza y cuando abrieron la frontera me vine a España, me puse a hacer vídeos y llevé a cabo todo lo que había soñado", relata.
Tras hacer realidad su sueño, y desde su segundo hogar en el país -Ibiza- Cuñado nos cuenta que él sube vídeos en los que recorre toda la geografía española. No hace ascos a ningún lugar, no busca visitas en sus vídeos. "Las visualizaciones es lo de menos, lo importante es el valor patrimonial y cultural. Si quisiera eso iría a ciudades más grandes y no a sitios pequeños. Yo me dedico más a pueblos de 100 habitantes o ermitas derruidas. El valor histórico es más fuerte; a ver quién hace un vídeo sobre Valdeherreros, que es una ermita abandonada", dice.
El apoyo de sus vídeos es diverso. En algunos supera las 50.000 visitas. Y hace poco subió un vídeo de Aranda -que probablemente hayan visto- y que acumula más de 9.000 visitas. Ante el impacto de ser visto por tantos convecinos, Cuñado explica entre risas que "me entra la risa, el vértigo... Aunque de las 9.000 visitas del vídeo mi madre lleva unas 2.000". "Yo soy de un pueblo de 400 habitantes como Milagros, he vivido entre Milagros y Aranda. Y cada vez que un vídeo supera la población de mi pueblo ya me da vértigo. Es como un dato muy característico", afirma.
Y... ¿cómo hace los vídeos? ¿Los prepara? "Cuando haces algo artístico y das en el clavo, las cosas empiezan a aparecer solas. Te pones a grabar una iglesia y en ese momento un señor se te pone a hablar y te enseña su bodega, y conoces a una chica que baila flamenco... Al final todo eso acaba surgiendo, es la magia del arte, pero lo primero es la idea. Que el lugar llame mi atención. Después de grabar llega todo el proceso de guion, sonido, retoque...", afirma.
La vida de Cuñado ha cambiado. Pero sus raíces y su amor por ellas sigue siendo el mismo. Este ribereño ha encontrado su vocación; una ocupación que le hace muy feliz, y mediante la cual llega a un público muy amplio, que solo por ver lo feliz que es cuando graba un vídeo en su tierra, tendrá claro que la Ribera del Duero es un lugar a visitar por sus patrimonio, gastronomía, y gentes... como Carlos.
El ribereño que dejó Irlanda para enseñar al mundo lo que nos rodea
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Jorge Alvarado
Periodista. Responsable Digital de la SER en Aranda. Presentador de Hoy por Hoy Peñafiel y El Banquillo...