Recogen firmas por la gestión pública de la Escuela Infantil de Buenavista en Getafe
Las familias del barrio quieren evitar que sea una empresa privada quien gestione este centro educativo construido por el Ayuntamiento
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Exterior de la Escuela Infantil 'Arco Iris' de Getafe / Google Street View
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Getafe
La Escuela Infantil ‘Arco Iris’, construida en el barrio de Buenavista junto al colegio ‘María Blanchard’, comenzará a funcionar en septiembre para el curso 2021/2022. Las familias del barrio han comenzado una recogida de firmas para tratar de evitar que su modelo de gestión sea privado, pese a que su construcción corrió a cargo de las arcas públicas del Ayuntamiento de Getafe.
La petición, que se acerca ya a las 1.000 firmas en change.org, asegura que el Ejecutivo autonómico “ha impuesto la gestión indirecta como requisito inexcusable para ser incluido en su red de Escuelas Infantiles”. Las familias destacan la importancia de la etapa infantil en la educación, y critican que “las opciones privadas suponen un negocio con el que se lucran empresas privadas”, unas entidades que “en la mayoría de los casos no tienen nada que ver con la educación y que obtienen beneficios precarizando el trabajo docente y degradando las condiciones materiales y educativas de los centros”.
Cristina Vázquez, una de las madres del barrio de Buenavista en Getafe, repasa la situación de la Escuela Infantil Arco Iris
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Cristina Vázquez, una de las madres del barrio, asegura que pidieron plaza en el centro con la esperanza de que iba a ser una escuela infantil pública, pero este modelo ha cambiado. Indica que es “una sorpresa” la imposición de la Comunidad de Madrid bajo la amenaza de sacar al centro de la red de Escuelas Infantiles públicas, y cree que esto supondrá “abaratamiento de costes, bajada de número de profesores en las aulas, menos controles de calidad en servicios como la limpieza o el comedor…”. Cristina cree que la privatización de la gestión supone disminución de la calidad general, y además todavía no se sabe qué empresa estará al frente con el consiguiente desconocimiento de su proyecto educativo. Finalmente los padres también temen que el proceso de concurso público pueda ir más allá del 1 de septiembre con la incógnita del comienzo del curso.
Las obras de construcción de esta Escuela Infantil supusieron una inversión pública de 1,7 millones de euros. Cuenta con 8 unidades divididas en aula de bebés, 2 aulas para niños de 1 a 2 años, 2 aulas de 2 a 3 años, clase para niños de 3, otra para 4 y otra más para niños con 5 años, y sala de usos múltiples, zonas comunes, área de administración y zona de servicios.