¿Cómo permite Ciudadanos que Granada se gobierne así?

Jerez de la Frontera

Hace 17 años, corría 2004, la entonces alcaldesa de Jerez, María José García Pelayo, decidió gobernar el Ayuntamiento de la quinta ciudad más poblada de Andalucía con el apoyo de siete concejales y el rechazo de 19.

El PP había sido la tercera fuerza más votada en las elecciones municipales -por detrás del PSOE y los andalucistas- pero un pacto con Pedro Pacheco aupó a la dirigente popular hasta la alcaldía. En esas negociaciones estuvo Javier Arenas y Antonio Sanz y nos contaron que el acuerdo, firmado “con luz y taquígrafos, según nos llegaron a decir, incluía un mandato 2+2, con rotación de alcaldes. Primero gobernaría Pelayo y después, Pacheco.

Al llegar el ecuador del mandato, el PP no cedió la alcaldía y desveló que había otro pacto, uno paralelo al de la luz y el taquígrafo, un supuesto acuerdo verbal por el que Pacheco no tomaría el bastón de mando.

Pacheco exigió el cumplimiento del pacto escrito; Pelayo lo destituyó como primer teniente de alcaldesa; los nueve ediles andalucistas dejaron el gobierno y el PP dirigió la ciudad en un evidente desgobierno.

Aquello duró muy poco. La alcaldesa popular no dimitió y fue desalojada por una moción de censura que se fraguó en 20 días. Entonces el PSOE accedió a la alcaldía de la mano de Pacheco y dos años más tarde los socialistas ganaron las elecciones locales en Jerez con mayoría absoluta.

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Les suena, ¿verdad? En Granada, hace casi dos semanas seis concejales del PP y dos de Ciudadanos han abandonado el gobierno municipal. El alcalde, de Ciudadanos, Luis Salvador, quien quedó tercero en los comicios locales, se ha negado a la rotación de un acuerdo 2+2 y sigue dirigiendo la ciudad con 25 concejales en contra de un total de 27.

Ya han pasado 13 días. ¿Cómo permite Ciudadanos que Granada se gobierne así?