Las ONG exigen más implicación de las administraciones ante la crisis: "La falta de respuesta es una condena"

Tenerife

La realidad socioeconómica de la isla suma un nuevo balance; en 2020 Cáritas Tenerife atendió un 20 por ciento más de peticiones de ayuda respecto a 2019. La crisis sanitaria ha tenido graves repercusiones económicas entre las familias más vulnerables. "Los tres primeros meses de confinamiento hubo llamadas muy dramáticas, de gente que no sabía a donde llamar y que se encontraban con muchas puertas cerradas", confirmaba Ricardo Iglesias, secretario general de Cáritas Tenerife. 

Tras el balance de 2020, desde la ONG reconocen que les preocupa lo que puede suceder en los próximos meses cuando dejen de estar vigentes los ERTE o la moratoria antidesahucios. Según Iglesias "puede pasar de todo; puede pasar una situación muy complicada ya que tenemos peores datos que la crisis de 2008". 

En relación a los diferentes programas de ayudas y a los fondos anunciados por diferentes administraciones, Iglesias cree que la clave estará en la manera de gestionarlos y avisa: "se prometen muchos fondos pero hay que ver cómo se gestionan. La letra pequeña no está escrita". Para la ONG el gran peligro es que esos fondos acaben en grandes infraestructuras o en gran grandes proyectos que ya existen y se pierda la oportunidad para utilizarlos en otro tipo de planteamientos, en la línea de una "restructuración social en el que nadie se quede atrás".

Precisamente aquí es donde el tercer sector de las Islas está reclamando mayor implicación de las administraciones locales. Para el presidente de Cruz Roja en Canarias, "la administración tiene que ser mucho más ágil a la hora de dar respuesta a los ciudadanos, y más cuando estamos hablando de sectores tan vulnerables". "Es hora de grandes pactos sin findes partidistas", remataba Ricardo Iglesias.