Los dos profesores acusados por la muerte de un menor en una excursión aseguran que estuvieron "vigilando"
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/AVTJB4Q7MVML3J2XIQ46W3YBKE.jpg?auth=a3a80671e0f50566ed85e1eafc51a99cddadaa227527bc1277e186a6b4280e61&quality=70&width=650&height=487&smart=true)
Juicio a los dos profesores, esta mañana. / Europa Press
![Juicio a los dos profesores, esta mañana.](https://cadenaser.com/resizer/v2/AVTJB4Q7MVML3J2XIQ46W3YBKE.jpg?auth=a3a80671e0f50566ed85e1eafc51a99cddadaa227527bc1277e186a6b4280e61)
Córdoba
Los dos profesores acusados de un delito de homicidio imprudente tras la muerte de Juan David, un niño de unos 13 años ahogado en la zona de los Baños de Popea durante una excursión del IES Colonial de Fuente Palmera en mayo de 2018, han defendido que estuvieron "vigilando" a los menores. Y que no notaron que tuvieran problemas para nadar, ni les avisaron de que fuera así, tras contar con las autorizaciones, a la vez que "nadie" advirtió de que la zona fuera peligrosa, ni había señal al efecto.
Así lo han manifestado en el juicio del Juzgado de lo Penal número 4 de Córdoba, donde los dos procesados, que han lamentado los hechos, han declarado que no escucharon "el más mínimo ruido, manotazo, aspaviento" o "voces de socorro", porque de lo contrario habrían "reaccionado", a lo que han agregado que "ninguno de los niños" con los que estaba nadando Juan David dijo "nada", aunque uno de ellos comentó tras su ausencia que "había bromeado a lo largo del día diciendo que se ahogaba'", según el testimonio de los profesores.
Mientras, la madre de Juan David ha explicado que firmó la autorización de la actividad en los Baños de Popea, pero que "si hubiera conocido la zona, no lo habría autorizado", a lo que ha agregado que su hijo "no tenía la destreza de nadar".
"Le dejaron ahogarse en una poza", ha dicho la progenitora, quien ha subrayado que aunque hubiera ido con ella, "no le habría dejado" bañarse, precisando que en la actividad anterior a los hechos iban "con los trajes de neopreno" y el material para la espeleología. La madre reclama la indemnización que corresponda.
La Fiscalía pide para cada uno de los profesores cuatro años de cárcel y otros tantos de inhabilitación para ejercer su profesión.
Fue sobre las 19:00 horas del día de la excursión, el 29 de mayo de 2018, cuando los docentes y el grupo se dieron cuenta de que el menor no estaba y comenzó la búsqueda. Había estado nadando con unos compañeros hacia unas cascadas para las que tenían que atravesar una poza de unos 5 metros de profundidad.
Al respecto, el escrito de la Fiscalía apunta que "los acusados omitiendo las más elementales normas de cuidado a cuya observancia venían obligados, desatendieron la diligencia debida cuando los menores se bañaban en la zona peligrosa, sin advertirles del riesgo", dado que, según el fiscal, "conocían la existencia de la poza".
En el dispositivo de búsqueda en la zona participaron patrullas de Seguridad Ciudadana, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y el Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, junto a efectivos de los Bomberos de Córdoba, la Policía Local y grupos de voluntarios.
Desde el Servicio de Emergencias 112 Andalucía precisaron que el cuerpo sin vida de Juan David fue localizado pasadas las 0:00 horas del día 30 de mayo a tres metros de profundidad en una zona rocosa situada en una de las pozas del río.
Los forenses que practicaron la autopsia al menor de edad concluyeron que el fallecimiento se produjo por "ahogamiento", según la información trasladada al Juzgado de Instrucción número 7 de Córdoba, en funciones de guardia, confirmada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
Mientras, la familia de Juan David decidió repatriar su cuerpo al país en el que nació, Bolivia, para ser enterrado, después de lograr el dinero necesario para ello con el apoyo del Ayuntamiento de Fuente Palmera, localidad cordobesa donde residía, y el AMPA del IES Colonial, en el que cursaba estudios. El citado pueblo vivió dos días de luto oficial.
Por su parte, el alcalde, Francisco Javier Ruiz, lamentó los hechos "bien por un despiste, bien por no valorar el peligro o por cualquier otra circunstancia", a la vez que comentó que "era un niño bastante querido, afable y cariñoso, al igual que sus padres".