De cabeza al infierno

Valladolid

El Real Valladolid abrió la puerta del infierno tras su derrota ante el Villarreal y ya se instala en los puestos de descenso sin depender de sí mismo en las dos jornadas que restan. Sólo un milagro salvaría a los de Sergio González de consumar la temporada más triste que se recuerda por estos lares con la salvación que ahora se sitúa a dos puntos, línea que marca el Huesca que sí supo ganar al Athletic.

Lo cierto es que el Valladolid intentó hacer un partido serio en defensa, pero con eso ya no basta y una vez más fue incapaz de ganar, acumulando 19 partidos en los que sólo logró una victoria, lo que le ha condenado al abismo.

Ante el Villarreal intentó aguantar y vivió de llegadas esporádicas en las que no hubo suerte en el remate, aunque tampoco sufrió en exceso al menos durante 45 minutos. Tras el descanso no hubo cambio de marcha y no se notó la necesidad de ganar. El Yamiq la tuvo para adelantar al Valladolid pero Asenjo la sacó de forma milagrosa y pocos minutos después en el 68', Gerard Moreno hacía el 0-1 desnudando las vergüenzas de la defensa del Real Valladolid, sobre todo de Nacho y de Janko. 20 minutos por delante y opciones de pelear, pero ya no se vio nada más por parte de los de Sergio a los que se les apaga la luz cuando encajan salvo raras excepciones. Sí se vio un gol más, el que puso en el marcador Capoue para cerrar el 0-2 definitivo cuando el partido ya agonizaba.

Más de lo mismo y una derrota que evidencia la falta de juego, de concentración, de intensidad y de necesidad que parece tener este equipo y que les conduce directamente a las puertas del infierno de Segunda.