Las familias del CEIP Gabriel Miró entregan más de 300 alegaciones a Educación y le exigen una solución rápida

Alicante

Las familias del CEIP Gabriel Miró de Alicante han entregado este jueves más de 300 alegaciones en la Conselleria de Educación, para que esta dé una solución efectiva de cara al próximo curso escolar, tras la sentencia que anula la jornada continua y que, tal y como adelantó Radio Alicante, les obliga a volver a la partida. Una sentencia que es firme y contra la que no cabe recurso.

En estos escritos explican "los inconvenientes sociofamiliares, laborales, sanitarios y psicopedagógicos que conlleva el cambio repentino de jornada", a los que se suma el "previsible efecto negativo" que tendría el aumento de entradas y salidas al centro, en un contexto de pandemia, por las aglomeraciones en las inmediaciones.

"Nuestros hijos se han adaptado a horarios y rutinas de estudio, tienen actividades fuera del colegio y las familias durante cinco años hemos organizado nuestra vida laboral y social en función del horario escolar", explican en un comunicado.

En él también advierten del problema del servicio de comedor, que no podría dar cabida al aumento de alumnos que se quedaría a comer al tener jornada partida, debido a la adecuación de espacios por la pandemia.

Rubén García, padre afectado y portavoz de estas familias, destaca que 312 de las 400 del colegio, un 75 % del total, han alegado contra esta situación, lo que demuestra que "la gran mayoría del centro quiere mantener la jornada continua". Por eso, pide que se les escuche.

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Insiste García en que la Conselleria de Educación ha tenido tiempo más que suficiente desde el inicio de la denuncia para paliar y corregir sus deficiencias en la normativa. Y espera que no se escude en la pandemia y en plazos administrativos para alargar el proceso.

"Nuestro miedo es que por retrasos burocráticos perdamos no un curso, sino dos", explica en declaraciones a Radio Alicante García, que exige a la Conselleria una nueva normativa que permita a las familias de nuevo elegir la jornada escolar.

Advierte García de que la vuelta a la jornada partida "va a destrozar el colegio, va a invitar a la fuga de alumnado y profesorado y a la no matriculación de niños y niñas el curso que viene".

"Un año a lo mejor lo soportas, pero dos va a ser contraproducente para el colegio en todos los aspectos", señala.