"No te quites nunca el sayo cuando vengas al Moncayo"

Vera de Moncayo

"No te quites nunca el sayo cuando vengas al Moncayo". El polifacético Curro Fatás cerraba así La Rebotica de Radio Zaragoza, que se ha emitido hoy, viernes, desde el Monasterio de Veruela, coincidiendo con una nueva edición del Foro de la España Vaciada, como lugar de oportunidades o para cambiar de vida. 

El que fuera cantante de uno de los grupos más pegadizos de los 80, Puturrú de Fuá, cambió el turismo de playa al que tanto alabó con aquel 'No te olvides la toalla', por la gestión turística de una fortaleza construida por los Caballeros de Malta en Añón de Moncayo, un pueblo de apenas 200 habitantes.

Es una de las historias y esperanzas de vida de este Foro, que aborda el turismo rural como oportunidad. La pandemia ha traído también que la gente de las ciudades vuelva a mirar a sus provincias, en este caso, la de Zaragoza, para redescubrir lugares cercanos, como en Parque Natural del Moncayo. 

En Vera de Moncayo la influencia del Monasterio de Veruela es alargada, y más que lo puede ser cuando finalmente sea integrado en la red de Paradores. Un municipio en el que gobiernan PSOE y PP, un pacto que sorprende, teniendo en cuenta ahora la enconada campaña electoral de las autonómicas de Madrid.

Su alcaldesa, Marta Azagra, ha destacado que "en los municipios pequeños, no se vota tanto a los colores - que eso sí que es fundamental - pero votas también a las personas". En ese momento, "nos sentimos en Vera que éramos moneda de cambio y por la tranquilidad de los vecinos y por poder dar un servicio adecuado y trabajar por ellos, hicimos este pacto; dejamos los colores a un lado porque pensamos en nuestros vecinos".

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Dinamizar la vida cultural de los pueblos resulta necesario para sus habitantes, que también permite generar interés en el turismo. Es el caso del Burosque Encantado, que ha impulsado la asociación Bureteando y que ha detallado Laura Baena; gente joven queha apostado por quedarse en el medio rural y aportar riqueza e ilusión a su entorno.  En Bureta, en el Campo de Borja, hay duendes y setas mágicas entre los pinos, una recreación de un mundo sacado de los cuentos.

Pero, ¿qué hace falta para decidir vivir y volver al mundo rural? Asegurar el bienestar. "No pensamos que las políticas tengan que ir destinadas a asegurar un umbral o un número de personas en ciertos sitios sino que lo que nos preocupa es la gente y la libertad de elección de la gente", ha señalado el director de la Cátedra  contra la despoblación en la Universidad de Zaragoza, Vicente Pinilla.

Así, "lo que queremos es que haya unas condiciones para que las personas que decidan en el medio rural lo puedan hacer realmente; y que no se enfrenten a una situación en la que, por mucho que lo deseen, no puedan".