Fingimiento

Asturias

Qué manía les ha entrado a algunos políticos con eso de que de la actual pandemia vamos a salir más fuertes. Que no, que se pongan como se pongan no va a ser así. Habrá que ver cómo se puede capear de la mejor manera posible el temporal derivado de los graves problemas económicos surgidos de la larga crisis sanitaria y humanitaria provocada por el coronavirus. Pero siempre reconociendo que no va a ser fácil y que lo mejor sería no desperdiciar oportunidades en batallas inútiles.

Fingimiento: Acción y efecto de fingir. Fingir: Dar a entender algo que no es cierto. Esa es, la del fingimiento, la labor fundamental a la que se dedican los políticos que nos han tocado en suerte en estos complicados tiempos de la Covid 19. La actividad económica ha descendido de forma dramática, el paro ha aumentado, los ERTES ahí siguen a la espera de un relanzamiento empresarial y sin embargo oyendo a la clase política en su conjunto da la sensación de que vivimos en el mejor de los mundos. La simulación, la apariencia o el engaño han adquirido demasiado peso en la vida pública actual.

Predominan los fuegos de artificio. En todos los niveles de la Administración. Pero lo más cercano quizás ayude a entender mejor lo que pasa. Ahí tenemos, por ejemplo, el campo de San Francisco de Oviedo. Mediado ya casi el mandato del Gobierno municipal del PP y Ciudadanos no se ha hecho nada de nada para su mejora (bueno, se han puesto a funcionar las fuentes), aunque, eso sí, en los medios de comunicación no se para de escribir y de hablar un día sí y otro también de que si se va a hacer esto y lo otro. Y ya está. Eso es todo. ¿Y cuantos años lleva sin arreglarse el templete de música del Bombé? Que es un templete, un simple quiosco. ¿Están fingiendo o no los regidores ovetenses?