Perdidos entre decretos

Bilbao

Me venía a la cabeza ayer lo de que "el desconocimiento de la Ley no exime de su cumplimiento". Recordé que, a partir de hoy, solo podemos reunirnos con convivientes en espacios cerrados y me preguntaba cuántas personas lo saben. También cómo se las van a arreglar para intimar las parejas de novios que todavía se están conociendo, aunque esa es otra historia.

Y eso, sin contar con lo que decida el Gobierno vasco hoy. El que hasta hace unos días decía que probablemente no hacían falta nuevas restricciones y luego convoca el LABI y adelanta cierres de movilidad y limitaciones de hostelería a partir de 400 de incidencia. Ya no es 500. Bueno, el central creo que baraja 150 para acabar de marearnos. Hasta los más cafeteros tienen dudas de cuál es la norma en vigor después de seis órdenes de la consejera y diez decretos del lehendakari. En diciembre llegó a firmar tres distintos.

No es fácil gobernar en pandemia. Siempre vas a remolque de la enfermedad. Por lo menos del LABI de hoy hay que admitir que el Gobierno está siendo valiente, se quiere adelantar y ha aprendido del error. Podía haberse hecho el loco. Salvar la Semana Santa. Ahora bien, los perjudicados van a ser muchos. A esos sí que habría que salvarles, por lo menos, ayudarles.