La Red Sísmica de la Universidad de Alicante se amplía con dos nuevas estaciones

Alicante

Situada en la proximidad de la zona de contacto entre las grandes placas Euroasiática y Africana, el peculiar movimiento relativo de la península ibérica respecto de ambas placas la convierte en firme candidata a la aparición de cordones o cinturones de sismicidad, tanto en la cordillera pirenaica como en las cordilleras béticas.

En el extremo nororiental de las dos grandes placas, la Comunitat Valenciana ha registrado a lo largo de la historia numerosos episodios sísmicos cuya intensidad, en general, ha sido calificada de moderada, aunque en ocasiones no muy lejanas han llegado a producir auténticas catástrofes para la población.

Ampliar

Cerrar

El primer evento del que tiene constancia la Unidad de Registro Sísmico de la Universidad de Alicante data de 1048 y se sitúa en Orihuela, un episodio sísmico con una intensidad de grado VIII en la escala EMS-98.

A partir de 1258, entre otros ejemplos documentados, destacan los episodios de Tavernes de la Valldigna (grado VIII-IX) en 1396; los de Orihuela, en 1482 (grado VIII) y 1484 (grado IX); Alcoy, en 1620 y 1644 (ambos de intensidad VIII) o el de Estubeny, en 1748 (grado VIII).

Sin embargo, la falla del Bajo Segura provocó la serie sísmica de Torrevieja, acaecida entre 1827 y 1829. En ella se inscribe el terremoto más destructivo de la Comunidad Valenciana, acaecido el 21 de marzo de 1829, y cuya intensidad de IX-X se llevó por delante la vida de 389 personas.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

La Red Sísmica de la UA se amplía con dos nuevas estaciones

Casi doscientos años después, la Red Sísmica de la Universidad de Alicante ha ampliado y mejorado su red de estaciones con la instalación de dos nuevos sismógrafos en los faros de Cabo Tiñoso y de Portmán (Murcia).

Su señal, recibida en tiempo real en red, cubrirá un vació de cobertura que permitirá mejorar sensiblemente la detección de terremotos en el sur de la provincia de Alicante y en el área limítrofe de Murcia, cuenta José Delgado, director de la Unidad Sismológica de la Universidad de Alicante y profesor del departamento de Ciencias de la Tierra.

Ampliar

Cerrar

La Red, en pleno proceso de actualización, está formada en la actualidad por cinco estaciones, una situada en el parque natural de la Font Roja (un sismógrafo), dos en Santa Pola (un sismógrafo y un acelerómetro) y las dos recientemente incorporadas en los faros de la costa murciana. Dentro de sus planes, la Unidad tiene prevista la inclusión de otras estaciones en Almoradí, San Pedro del Pinatar y Elche.

Las estaciones se controlan de forma remota y envían sus resultados a la Unidad Sismológica de la Universidad, que los analiza y comparte también con la Red Sísmica del Instituto Geográfico Nacional, completando la información. Como explica el profesor Delgado, mientras que la Unidad de Registro Sísmico hace un trabajo de investigación, la Red Sísmica Nacional proporciona las alertas.          

Ampliar

Cerrar

La instalación de estos centros ha sido posible “gracias a la total disponibilidad y colaboración de la Autoridad Portuaria de Cartagena, que ha concedido el permiso para instalar los equipos en estos faros, así como la gran ayuda prestada durante todo el proceso de instalación”.

El mantenimiento y ampliación de la Red Sísmica se ha llevado a cabo gracias al convenio de colaboración que la Universidad de Alicante mantiene con la Diputación de Alicante y el Consorcio Provincial para el Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento de Alicante desde el año 1993.

Content not defined

En la parte superior de este artículo pueden escuchar de nuevo la conversación que el director de la Unidad Sísmica de la UA, el profesor José Delgado, ha mantenido con Carlos Arcaya en Hoy por Hoy Alicante.