Ansiado contacto con la calle
La Fundación Social Virgen de los Remedios de Pozaldez inicia los paseos con sus residentes
Pozaldez
Después de un año muy difícil, los residentes de la Fundación Virgen de los Remedios, en Pozaldez, ya han salido a la calle para dar un paseo y tener los primeros contactos con vecinos y familiares, eso sí, siempre manteniendo distancias.
Los últimos dos jueves han aprovechado, con los “abuelos” que han querido, para salir a la calle, disfrutar del parque o pasear por las calles de Pozaldez y saludar a familiares y vecinos que se muestran igual de ilusionados por verse de nuevo. Pero esta no es la única iniciativa que se desarrollará desde la dirección del centro porque también han programado la “Yayoruta”.
Aprovechando el bus eléctrico que tiene una empresa de atracciones festivas, y teniendo en cuenta que esta no cuenta ahora mismo con actividad de este tipo, organizarán rutas por el municipio para los residentes y trabajadores. Aún está por determinar los días en los que se desarrollará, en función de la meteorología, pero la idea es ofrecer a lo largo de tres horas esta alternativa de paseos turísticos en autobús según ha explicado el director del centro, Guillermo Rodríguez.
Con estas acciones se está viendo la luz al final del túnel después de un año muy complicado para residentes y trabajadores. Hace ya un mes que recibieron la segunda dosis de las vacunas y es el momento de olvidar unos meses en los que han sacado lo mejor de cada uno, según apunta Rodríguez, quien se muestra muy orgulloso de trabajadores y residentes.
Ahora mismo el centro tiene 27 plazas ocupadas, de las 28 con las que cuenta, porque una ha de estar vacía por si surgiese algún caso de Covid. Durante el mes de octubre vivieron un brote complicado y han lamentado la pérdida de dos personas en este tiempo. Eso sí, han intentado que en su aislamiento la vida fuese lo más agradable posible y así, han celebrado Ferias del Rocío durante el Carnaval, siguen con sus talleres de cocina y otras celebraciones como la de este fin de semana en el que se ofrecerá un chocolate para festejar el cumpleaños de un residente. A todas estas iniciativas de la dirección, y con la complicidad de los trabajadores, se suman ahora los primeros contactos con la calle, esos que les servirán para estar más cerca de lo que se perdió hace un año.