La Unidad Canina de Gijón, en forma tras cumplir 32 años

Gijón

Hace 32 años apenas había modelos que seguir. Solo Madrid y Sevilla sirvieron a la Policía Local de Gijón como guía para poner en marcha su Unidad Canina. Un departamento que empezaban con seis canes, número que se mantiene en la actualidad aunque con varias diferencias.

Según ha contado el inspector Santiago Sánchez en SER Gijón, responsable de la Unidad y uno de los impulsores hace ya tres décadas, los perros en esos primeros años estaban adscritos a la Policía de barrio mientras que ahora, lo están a la Atención Ciudadana, con tres turnos: mañana, tarde y noche.

"Empezamos adiestrándolos en obediencia y defensa. Eran perros patrulla. Algunos adiestrados en drogas, otros en salvamento o rastreo de personas, pero a raíz de varios cursos de adiestramiento se decidió centralos más en labores oficiales. Actualmente todos los perros están adiestrados en perro patrulla y drogas". Un adiestramiento que no termina nunca en sus años de servicio y que no deja de modernizarse. Lo que apenas cambian son las razas más idóneas para esta labor. Los pastores alemanes siguen siendo la primera elección, aunque en la Unidad Canina gijonesa también ha habido otras razas, como el rottweiler o el dóberman, y más recientemente el pastor belga malinois, como el último perro policía en abandonar la unidad por jubilación.

Argos, que así se llama y ahora vive adoptado por una familia madrileña gracias a la gestión de la asociación 'Héroes de 4 patas', estuvo 11 años de servicio en la Policía Local, algo más que la media pues la vida laboral de estos perros policía suele oscilar entre los siete y los nueve años. Un tiempo suficiente para establecer fuertes lazos emotivos con su policía guía, y es que, cuando llega el momento de separarse "da mucha pena. El criterio que se seguía siempre era dar prioridad al guía del perro por si podía hacerse cargo de él, en el caso de que no fuera así buscábamos la mejor adopción. Es muy duro desprenderse de ellos", ha declarado el inspector Santiago Sánchez en SER Gijón.