Donostia reduce un 8% su presupuesto en 2021 pero sube un 5% el gasto social
El presupuesto consolidado ascenderá este 2021 a casi 397,4 millones de euros
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Eneko Goia, alcalde de San Sebastián, durante la presentación de los presupuestos para este 2021. / JAVIER ETXEZARRETA (EFE)
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San Sebastián
El Ayuntamiento de San Sebastián gestionará en 2021 un presupuesto consolidado de casi 397,4 millones de euros, un 8,1% menos que el año pasado, debido a la bajada de ingresos causada por la crisis sanitaria, a pesar de lo cual aumentará un 4,9% su gasto social, hasta alcanzar los 33,4 millones.
Respecto a las inversiones previstas, las cuentas diseñadas para este ejercicio contemplan destinar unos 39 millones de euros, a los que se añaden otros 40 millones correspondientes a las no ejecutadas durante 2020, cuando la pandemia obligó a dejar en suspenso muchas de ellas.
Así lo establece el borrador del proyecto presupuestario para 2021 elaborado por el gobierno municipal PNV-PSE, que han presentado este miércoles en rueda de prensa el alcalde jeltzale, Eneko Goia, y la concejala socialista de Desarrollo Económico y Empleo, Marisol Garmendia, junto al delegado de Hacienda y Finanzas, Jaime Domínguez-Macaya.
El documento económico, que no ha podido ser aprobado para principios de año como es habitual debido a las incertidumbres financieras generadas por la covid-19, será ratificado mañana por la Junta de Gobierno Local y presentado después a los grupos políticos en la comisión de Hacienda.
A partir de entonces, empezará su tramitación y negociación con los partidos de la oposición, a los que Goia ha "tendido la mano" para ajustarlo con sus enmiendas y propuestas, si bien no necesitará de ningún apoyo para ser aprobado en el pleno extraordinario previsto para el 31 de marzo dada la mayoría absoluta de la que goza el ejecutivo de coalición.
El presupuesto consolidado del Ayuntamiento para 2021, que incluye a las sociedades y entidades municipales, "está caracterizado por la prudencia y la ambición", ha destacado Goia, quien ha asegurado que "dará respuesta a las necesidades" de los donostiarras, como muestra el incremento de "las partidas destinadas a acciones de protección y promoción social", pero también "preparará a la ciudad para la recuperación y reactivación económica" una vez superada la crisis.
Según ha explicado, el descenso del 8,1% del presupuesto municipal, y del 4% en su gasto corriente, responde sobre todo a "la importante caída de los ingresos" previstos, que se han reducido en 35 millones de euros en comparación a lo presupuestado en 2020, por un lado por los 10 millones menos que prevé recibir del Fondo Foral (FFFM), pero también por las aportaciones extra que la institución tendrá que hacer a sus entidades más afectadas por la pandemia.
Es el caso de la compañía de autobuses Dbus, a la que el Ayuntamiento tendrá que aportar 5,3 millones de euros más; Donostia Kultura, a la que destinará 2,3 millones adicionales al porcentaje con el que la financió en 2020; y las sociedades de Turismo y Fomento, que cerraron el ejercicio pasado con una disminución de ingresos de 430.000 y 340.000 euros, respectivamente.
No obstante, las cuentas globales del consistorio también decrecen porque sólo incluyen 700.000 euros de presupuesto para Anoeta Kiroldegia, lo que supone 6,3 millones menos que el año anterior, debido a que las obras de remodelación del estadio terminaron y, aunque las cantidades eran revertidas por la Real Sociedad y tenían "un efecto neutro", técnicamente figuraban en las cuentas anuales.
La sociedad de vivienda Donostiako Etxegintza reduce asimismo su presupuesto en 7 millones en 2021, pero en este caso debido a que éste será "una año de transición" y "preparación de proyectos futuros", ha puntualizado el concejal de Hacienda.
La segunda Teniente de Alcalde, Marisol Garmendia, ha sostenido que los presupuestos presentados "son los más sociales de los últimos años", pues se centran en "no dejar a nadie atrás", "reactivar la economía y el empleo", y encaran "el reto de la sostenibilidad medioambiental y la lucha contra el cambio climático".
Además de "las inversiones y el fortalecimiento de los servicios sociales", ha anunciado que se pondrá en marcha un nuevo Plan de Reactivación Económica, centrado especialmente en sectores como el comercio y la hostelería.
Entre las partidas previstas para inversiones, nuevas o de continuación de proyectos iniciados, destacan las destinadas a la digitalización del archivo municipal (1,3 millones), al puente de Astiñene (497.000 euros), la urbanización de Eskusaitzeta (1 millón), la continuación de los equipamientos del polideportivo de Altza (3 millones) y el edificio Pescadería de la Bretxa (1 millón).
El Ayuntamiento ha dispuesto una cantidad inicial de 15 millones de euros para la compra de los terrenos del acuartelamiento militar de Loiola, que será "ampliable" hasta el importe de compraventa que pacte con el Ministerio de Defensa.
El proyecto presupuestado contempla además "una bolsa de 10 millones de euros" en concepto de la financiación que podría recibir de los fondos europeos.