Me juego algo a que las amenzas de Vox quedan en nada en Alicante y todo sigue como siempre

La Columna de Carlos Arcaya: «Me juego algo a que las amenzas de Vox quedan en nada en Alicante y todo sigue como siempre»
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Alicante
Vamos a ver hasta donde llega el viraje de Pablo Casado y cómo actúan los suyos en sintonía tras la moción de censura fallida de VOX y las amenazas al PP -allí donde gobierna- del partido de Abascal.

Carlos Arcaya / Silvia Cárceles

Carlos Arcaya / Silvia Cárceles
Si nos quedamos en el Ayuntamiento de Alicante, en donde la gobernabilidad está garantizada, haría bien el bipartito en aislar a la formación de extrema derecha. Y no se pide nada extraño. Se trata de que los dos partidos de derecha y centro derecha que gobiernan este consistorio actúen como lo hacen sus correligionarios de la mayoría de países de Europa.
Pero, para ello, hacen falta mimbres y voluntad política. Es fácil apelar al diálogo y al consenso, pero luego la fe se demuestra con obras, con hechos. De momento, de cara a la elaboración del presupuesto de 2021, el equipo de gobierno tiene la mano tendida del PSOE.
Y sobre otro asunto polémico de las últimas semanas, la ordenanza represora de la mendicidad y la prostitución, que difícilmente se justifica si no es para contener a su electorado más ultra, también harían bien en descartarla y apostar por medidas sociales. Vamos, por centrarse.
Veremos, pero, ya verán, me juego algo cómo lo de las amenazas de Vox queda en nada en Alicante y todo sigue como siempre.
Más información