"Compañero del metal", el libro homenaje a José María Calleja y su lucha por la libertad

Bilbao

"Compañero del metal" era uno de los saludos preferidos de José María Calleja. Seis meses después de su fallecimiento por covid-19 una veintena de personas del ámbito de la prensa, la política o la universidad rinden homenaje en un libro con ese título al periodista "pionero" en dar visibilidad a las víctimas de ETA.,Prologado por el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, "Compañero del metal. Miradas a la figura de José María Calleja" recoge textos de personas que, en su mayoría, le conocieron, como el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; y los periodistas Genoveva Gastaminza, Gorka Landaburu, Alberto Surio, Pepa Bueno, Eva Orúe y José Miguel Santamaría.

También participan el historiador Luis Castells, el fundador de la librería "Lagun" Ignacio Latierro, la presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, el filósofo Fernando Savater, la fundadora de Gesto por la Paz, Cristina Cuesta, el exdirigente del PP guipuzcoano Borja Sémper, el profesor y escritor Ignacio Sánchez Cuenca y los abogados José María Múgica y Eduardo Ranz, entre otros.

El delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, impulsor de la publicación, el responsable del área de archivo del Centro para la Memoria de las Víctimas del Terrorismo, Gorka Fernández Soldevilla, la periodista Eva Orúe y el coordinador del trabajo, Luis Aizpeolea, han presentado el libro .

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"Compromiso por la libertad"

Itxaso ha resaltado que el "compromiso con la libertad" y el "acompañamiento" a las víctimas del terrorismo fueron las facetas más importante de la carrera de Calleja, aunque también se implicó en el feminismo y "siempre fue partidario del humor".

Aizpeolea ha resaltado que en los peores años de la violencia en Euskadi otros periodistas como Genoveva Gastaminza o Gorka Landaburu "también plantaron cara" a ETA, pero Calleja fue "pionero en la visibilización de las víctimas".

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"En los años 80 los periodistas nos centrábamos más en los atentados, muchos hacían críticas, aunque no todos, pero las víctimas no existían en las crónicas porque pensábamos que había que primar que había que ir al fin de ETA", ha señalado.

"Independencia"

Calleja destacó además por su "independencia", ha indicado Aizpeolea, que ha recordado que cuando el periodista se trasladó a Madrid porque en Euskadi estaba "superamenazado" también "se plantó cuando el Gobierno del PP intentó manipular a las víctimas", una postura que le trajo "muchos disgustos".

Gaizka Fernández Soldevilla ha destacado que "Contra la barbarie", un libro "rompedor" que Calleja escribió en 1997, supuso un punto de inflexión y un "cambio de paradigma" en el tratamiento a las víctimas del terrorismo.

"A partir de su publicación nadie volvió a escribir de ETA de la misma manera, se puso en el foco en las víctimas", ha indicado.

Además los libros de Calleja tuvieron una "función reparadora" a quienes habían sufrido la violencia de ETA, que veían que "por primera vez eran tratadas como seres humanos y no como simples números" al tiempo que constituían una "vacuna contra el fanatismo".

Eva Orúe, que formó parte de la tertulia de mujeres que impulsó Calleja en CNN+, ha resaltado el "compromiso sincero" del periodista con el feminismo.

Calleja defendía que los periodistas están obligados a contar, al igual que se hizo con ETA, los actos de violencia machista, que "no deben ser tratados como sucesos".

En la situación de crispación política actual y de "moción de basura", ha dicho Orúe, Calleja, "que era un combatiente", apostaría "por volver a cierta idea del consenso" y "posiblemente optaría por excluir a quienes no están dispuestos a encontrar ningún consenso".