Los taxistas temen la llegada de un octubre sin ayudas, tras un verano "pésimo" con mermas de hasta el 75 %

Alicante

Los taxistas de la provincia y de la Comunitat temen que la llegada de octubre signifique el fin de las ayudas, con las que desde que se decretó el confinamiento han venido contando por parte de la administración.

Hacen balance de un verano "pésimo", en el que la facturación ha sido entre un 50 y un 60 % inferior de media con respecto al año pasado y que no augura mejora, por las malas previsiones que están revelando los últimos datos de la COVID-19, dice el presidente de Radio-Teletaxi en Alicante, Francisco Sánchez.

La merma del turismo y del inglés en particular, ha sido decisiva en las zonas costeras, como Benidorm y Torrevieja, además de la propia capital alicantina, y el sector ha quedado rematado por las limitaciones del ocio nocturno aplicadas a la hostelería, un colectivo con el que van de la mano, explica Sánchez, también vicepresidente de la Confederación de Autónomos del Taxi de la Comunitat.

Si la situación se prolonga dos meses más, "muchos compañeros", sobre todo los más jóvenes o de reciente licencia, "no podrán sobrevivir", dice. La prueba es que "el valor de las licencias se ha desplomado", asegura.

De momento, a partir del día 28 de este mes ya han sido autorizados por la Generalitat a trabajar cuatro días a la semana en vez de cinco, para rentabilizar mejor la hora.

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Señala Sánchez que hasta ahora han contado con EPI y mamparas facilitadas por la Generalitat y el ayuntamiento, pero las ayudas económicas han llegado poco a poco.

Como otros autónomos, se han beneficiado de las subvenciones por parte del Ministerio y de la Generalitat y de los pagos de las cuotas de la Seguridad Social pero a partir de octubre, insisten, no hay nada previsto. Además, es difícil justificar las mermas que solicita la administración, de hasta un 75% que han sufrido algunos taxistas, cuando es un cálculo que se valora sobre todo al finalizar el año, dicen.