Bruno desestima la oferta de renovación y da por concluida su relación laboral con el Levante

Valencia

La continuidad de Bruno González en el Levante no depende ni del cariño que le profese Paco López, ni del buen rollo que desprenda el vestuario, ni de las múltiples comodidades que le pueda proporcionar Quico Catalán. Es una cuestión de pasta y el dinero es lo más importante.

Bruno tenía muy claro desde hacía muchos meses que no renovaría en el Getafe y el Levante se cruzó en su camino como consecuencia del traspaso de Erick Cabaco. Una venta que se cerró sobre la bocina porque Bruno no quiso perdonar ni un euro del salario del Getafe y el Levante tuvo que rebajar en 250.000 euros el traspaso del central uruguayo y que terminaron en el bolsillo del futbolista canario.

Una actuación estelar en el escaparate de Orriols ante el Real Madrid era lo que Bruno necesitaba para que se le abrieran todas las puertas y firmar con 30 años el gran contrato que persigue desde que comenzó su carrera futbolística. La pandemia le ha complicado su futuro en México, en EEUU o en China que eran los destinos planificados y ahora tendrá que recalcular su ruta después de haber sido ofrecido al Real Valladolid, al Deportivo Alavés y a todos aquellos equipos de La Liga que necesitan un central para la 20/21.

El Levante ha querido aprovechar esta situación para convencer a Bruno y que firmase el contrato que le propuso en enero por dos temporadas adicionales. En las últimas horas le ha llegado a ofrecer una tercera fija, le ha subido los variables, pero Bruno quiere mucho más, quiere ser el central mejor pagado de la plantilla y el Levante no está dispuesto a romper la hucha y ni los códigos de vestuario cuando todavía no ha demostrado que merezca alcanzar ese nivel salarial.

Y en mitad de este tira y afloja, que seguirá algunos días más, nos encontramos con una discusión jurídica en la que el Levante interpreta que el futbolista debería terminar la temporada, porque firmó un acuerdo conjunto para someterse a una reducción salarial por la Covid-19, mientras los asesores de Bruno le aseguran que su relación laboral ha concluido.

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Por eso Paco López ha decido dejarlo en Valencia, no forma parte de la convocatoria que ha viajado a Valladolid, con independencia de lo que pueda pasar con una negociación que seguirá abierta hasta que el equipo regrese a la Ciudad Deportiva de Buñol y comprobemos si Bruno está dispuesto a entrenar o se despide de sus compañeros y recoge los enseres de su taquilla.