Otra falsa médica ha trabajado durante 4 años en un geriátrico de Sanitas
Es el segundo caso destapado durante la pandemia y que explica la Cadena SER tras el de un vecino de Terrassa que ejerció 13 días en otra residencia de la misma empresa. La mutua denunciará los dos falsos facultativos en los juzgados
Una mujer de 54 años durante 4 años ha estado trabajando de médica en una residencia de ancianos de Barcelona, cuando sólo tiene los estudios de odontología / Pxhere
Barcelona
Una auditoría interna de la mutua Sanitas desenmascaró a finales de abril a esta mujer de 54 años y nacionalidad española, que durante 4 años ha estado trabajando de médica en una residencia de ancianos de Barcelona, cuando sólo tiene los estudios de odontología.
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El caso está bajo investigación judicial y como ya ocurrió con el otro falso médico, también contratado por Sanitas en una residencia de ancianos de Sant Gervasi, los Mossos miran ahora con todo detalle todas las gestiones que hicieron los dos impostores. En el caso de la mujer tuvo tiempo de pasar consulta con los residentes, firmar informes médicos, certificados de defunción o administrar medicación. "Todo lo que hace un médico", indican fuentes de Sanitas.
La empresa propietaria de la red de geriátricos argumentó a la Cadena SER que hasta hace un año sólo pedían a los empleados el documento original de las tasas anuales de colegiado para asegurarse de que seguían en activo. Son los papeles que fue aportando esta mujer, que sin carrera de medicina, se dedicaba a hacer de médica en una residencia de ancianos de Barcelona.
Ha conseguido mantenerse en este cargo durante 4 años hasta que este año Sanitas cambió el sistema de control y comenzó a contrastar la información con el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona. Y fue entonces cuando se desveló el largo engaño.
El órgano que vela por los intereses de los facultativos comunicó a Sanitas que la mujer había falsificado la documentación y había aportado un número de colegiada inexistente. La mutua la expulsó y el Colegio denunció a los Mossos, que el pasado 29 de abril pudieron identificarla y llevar su caso a los juzgados por un delito de intrusismo y otro de falsedad documental. La empresa también se añadirá a la causa como acusación particular cuando llegue el momento procedimental.
