Fallece por covid-19, Francisco Bravo, hijo adoptivo de Valdepeñas en 2014

Valdepeñas

Este martes, a consecuencia del covid-19, ha fallecido el sacerdote Francisco Bravo del Castillo. Tenía 86 años, natural de Madrid, aunque residía en la localidad ciudadrealeña de Valdepeñas, desde hace seis décadas. Bravo nació el 10 de julio de 1934. Además, tras los estudios en el Seminario de Ciudad Real, fue ordenado sacerdote el 31 de mayo de 1968 en Campo de Criptana.

Además, sus primeros destinos fueron Alcázar de San Juan, así como la atención a las aldeas del Valle de Alcudia. Destinos en los que estuvo durante dos años. Seguidamente, en 1960, fue nombrado como coadjutor de la parroquia del santo Cristo de Valdepeñas, donde permaneció hasta el año 1968. Tras ello, fue nombrado como el primer párroco de la nueva parroquia de Nuestra Señora de Los Llanos. Allí permaneció hasta su jubilación en agosto de 2014. 

Asimismo, Bravo fue, durante muchos años, profesor de religión en los Institutos de esta localidad de la provincia de Ciudad Real. Asimismo, durante las Fiestas del Vino de 2014, fue nombrado Hijo Adoptivo de la ciudad del vino. Un reconocimiento del que se mostraba muy agradecido, durante el acto de entrega. 

También, Bravo, una vez retirado de la parroquia de Los Llanos, se mudó a vivir al centro de la localidad, por lo que se incorporó al equipo sacerdotal de la Parroquia de La Asunción. Sin embargo, en julio de 2019, con una salud delicada, ingresó en la Residencia de las hermanitas de los Ancianos, donde ha permanecido hasta su fallecimiento en el Hospital de Valdepeñas. Una residencia que ya ha registrado otros casos de covid-19. 

Finalmente, desde la Iglesia de La Asunción, en su honor, se han tocado las campañas, poco después del mediodía. Unas campanas que, volverán a sonar, cada día, en honor a "todos aquellos que han fallecido, como él, en la soledad del hospital, sin poder ser despedido por la gente querida", finaliza el comunicado de este templo religioso.

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