Los clubes están obligados a devolver parte del coste del abono si la Liga acaba sin público o se suspende

Valencia

A pesar de la tremenda incertidumbre que sigue envolviendo el hipotético regreso del fútbol, los clubes trabajan con los diferentes escenarios que pueden darse. Nadie es capaz de asegurar una fecha para la reanudación de la competición e incluso hay fuentes que dudan razonablemente respecto a la posibilidad real de finalizar la temporada. Pero la idea es estar preparados para dar una rápida respuesta a las situaciones que se desencadenarán cuando las autoridades sanitarias y futbolísticas marquen la hoja de ruta a seguir.

La corriente de opinión mayoritaria en los despachos de Primera reconoce que la opción más probable en este momento pasa por jugar todo lo que queda a puerta cerrada. La transición hacia la normalidad no será inmediata. Está descartado que el día siguiente a la conclusión de confinamiento puedan meterse 50.000 personas en un estadio. Por está razón, los clubes empiezan a asumir que la temporada 2019/20 -si se reanuda- concluirá sin espectadores.

Tanto en esta alternativa como en la de una posible suspensión definitiva de la competición, los abonados saldrían gravemente perjudicados. Habrían pagado por presenciar en directo una serie de partidos que se celebrarán a puerta cerrada. Según fuentes de AVACU (Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios), el marco legal actual obliga a los clubes a restituir a sus socios la parte proporcional del coste del abono para esos encuentros cerrados al público.

Para tratar de evitar pérdidas (3'5 millones de euros en el caso del Valencia y aproximadamente medio millón en el del Levante) por devoluciones en ticketing, los ejecutivos de algunos equipos diseñan estrategias a medio plazo. Una opción pasa por no reintegrar importe alguno ahora y descontarlo en el pase de la próxima campaña. Siempre sabiendo que se trata de un ofrecimiento para que aquellos que no reclamen el reembolso del dinero que les corresponde por ley.