Iguázel Elhombre: "Las personas primero"

Zaragoza

Esta situación es una mierda. Sin ambages. Sin moralejas. Yo no quiero pasar por aquí para valorar nada. Odio el misticismo de pensar que sufrir una tragedia nos hace mejores. Prefiero no tener que comprobarlo. Y yo ya valoro los abrazos que ahora me faltan, las risas, tener el miedo más recogido y no esparcido por toda la casa, poder dar un paseo, los vermús, la sanidad pública y un sistema de bienestar aún con todos sus peros. Valoro todo eso y sé que el ser humano es capaz de lo peor y también de lo mejor.

Ningún virus tiene que venir a enseñarme nada. Quien tiene que aprender algo de todo esto no somos las personas, es el Estado. Somos seres vulnerables. Pero lo que ahora se está enseñando es la fragilidad del sistema. Y de estas costuras que se le están desgarrando sí que espero que haya aprendizaje. La de que lo público es garantía de no dejar a nadie atrás porque nadie somos inmunes a que nos vengan mal dadas o a que una pandemia nos altere la vida, las relaciones, las facturas, los índices económicos. El bien común tiene que estar por encima de las leyes de mercado. Las personas primero. Que no se olvide.