Corrupción y listas de espera
Valencia
En el capítulo de la corrupción cuesta pasar página. Esta semana se ha producido la apertura del secreto de sumario de una pieza del caso Erial, que afecta al ex presidente Eduardo Zaplana. Y que acredita, nada menos, que 20 años de presunta actividad delictiva. 20 años de presunto saqueo a las arcas públicas, de robo planificado.
Cuesta no llevarse las manos a la cabeza, pero la realidad es que el escándalo social por estos hechos que se conocen con cuentagotas es cada vez menor. El capítulo de la corrupción está seguramente más que amortizado para el Partido Popular.
Es decir, no parece que la corrupción vaya a restarle ya muchos más votos al PP, ni que vaya a dárselos a los partidos de izquierdas, que alcanzaron el poder de la Generalitat aupados en parte por esta cuestión.
Y esto viene a cuento por la gestión política del día a día. Si la corrupción ya no condiciona el paso por las urnas, sí lo harán en un futuro asuntos como el de las listas de espera en Sanidad. Toca pasar de las palabras y los discursos, del relato, a los hechos. Cómo puede ser que 60.000 personas estén en lista de espera, o que haya gente que tenga que esperar más de seis meses. Hablar de medias para justificar que no estamos tan mal no convence a nadie. No habrá dinero, pero en política todo es cuestión de prioridades.