La magia de los Reyes Magos llena Palencia de ilusión

Palencia

Miles de personas atestaban las calles del centro de la ciudad para recibir a Melchor, Gaspar y Baltasar y a todo su séquito durante la cabalgata en la que sigue siendo la noche más mágica del año. Ni la niebla, ni el frío, nada puede con la ilusión de los niños palentinos en la cabalgata de Reyes.

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Abrían la comitiva los Bomberos de Palencia y su vehículo 'Alfa 2', la autobomba Magirus del año 1960, popularmente conocida como 'El abuelo', a partir de ahí las calles se llenaron de luz y color con las diez atracciones restantes, zancudos, música en directo, cuádrigas romanas, campaneros, pendones, soldaditos de plomo, bailarines de la Academia Smile, acróbatas del club de Gimnasia Artística, patinadores, 'La danza del elefante', un show francés de grandes dimensiones que llegó por primera vez a capital y, como no, las ocas de Miguelín, que este año sólo ha participado en la cabalgata palentina, además de tres carrozas infantiles.

Cerraban el desfile las tres carrozas principales, las de Melchor, Gaspar y Baltasar que provocaron todo tipo de reacciones en los más pequeños, nervios, risas, gritos y lágrimas por su presencia en las calles palentinas. Una vez en la Plaza Mayor fueron recibidos por el alcalde y demás autoridades municipales donde realizaron su ofrenda de oro, incienso y mirra bajo los acordes del Aleluya de Leonard Cohen interpretado por un coro de voces palentinas. En el recorrido quedaron 1.700 kilos de caramelos a modo de una lluvia dulce que marcaron el camino de regreso a casa para colocar los zapatos a la espera de que sus majestades acudieran durante la noche a dejar sus regalos.