Goleada en La Victoria
El Linares Deportivo tira de efectividad y se impone al Real Jaén en un derbi donde sólo sufrió en los primeros minutos del segundo periodo. Los azulillos amplían hasta los 16 puntos la ventaja sobre los jienenses.
Linares
El líder sigue imparable. Para alegría azulilla, hoy, conseguía doblegar al eterno rival en el campo de La Victoria. Los de Juan Arsenal lograron vencer al Real Jaén por un gol a cuatro, justo en el partido que ponía el punto y final a la primera vuelta liguera en Tercera División.
Partido exquisito en defensa de los azulillos y, sobre todo, efectivo en el plano ofensivo. El Linares se mostró especialmente peligroso a la contra en el primer periodo. De hecho, así llegaban los tres goles de ventaja con los que se fue al intermedio. El marcador se estrenaba con un gol en propia puerta de Gabri, en el 13'. Poco después, Iván Aguilar sacó a relucir su calidad para, tras una asistencia de Chendo, anotar el 0-2 de vaselina.
Y antes del descanso, "El Tigre" protagonizaría una galopada espectacular para, casi desde el centro del campo, encarar al meta jienense y subir el tercero al marcador. Celebración llena de carácter, aunque polémica para los seguidores blancos, en la que el 9 azulillo mandaba callar a La Victoria a la par que se besaba el escudo linarense.
Tras la reanudación, el Jaén despertó de su letargo y acosó, con llegadas peligrosas, la portería de Razak. El único gol local llegaba en el 54'. Juanca, esta vez, remató de cabeza un gran centro por la banda derecha que, cierto es, culminaba una elaborada y bonita jugada de combinaciones. Poco después, el defensa central Mauro tuvo en sus botas el 2-3 pero su disparo se marchó alto y desviado. Eran los peores minutos para un Linares Deportivo demasiado encerrado atrás.
El esfuerzo realizado sobre el verde por los jugadores de Alberto González terminó por pasar factura y, tras el arrollador comienzo del segundo tiempo, el Real Jaén empezó a perder poderío en el campo. Mientras tanto, en las filas azulillas, bastaba con la inteligencia y el oficio para controlar una segunda parte menos vistosa respecto al primer acto.
Quedaba, eso sí, el broche de oro para el clásico provincial. Isra, que saltó al terreno de juego de refresco, desató otra vez la locura en la grada linarense al transformar el 1-4 definitivo. Se paseó con calidad por la frontal del área y, su disparo, moría dentro de la portería de Angel de la Calzada. Concluía así el derbi provincial donde, en líneas generales, primó el orden defensivo y la efectividad visitante ante un voluntarioso pero impotente Jaén que se aleja hasta los 16 puntos de diferencia respecto al líder, el Linares. El clásico, esta vez, se tiñó de azul.