La canalización para llevar agua a la central térmica no estará antes de verano
Las obras afectarán principalmente a la calle Vives Llull de Maó

Cadena SER

Mahón
Menorca avanza hacia la reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera, pero el camino sigue siendo largo. Hasta el próximo junio no finalizarán las obras que deben llevar agua depurada hasta la central térmica de Maó.
Este 1 de enero entra en vigor la nueva Directiva Europea de Emisiones Industriales. Esta limitación deja en evidencia el frágil sistema energético de Menorca, que se abastece casi exclusivamente de la central térmica de Maó, que sigue quemando fuel-oil. A día de hoy, esta central sigue emitiendo una cantidad de gases superiores al límite que marca la Unión Europea.
La solución pasa por refrigerar sus turbinas con agua depurada y de momento, para evitar sanciones europeas, se está llevando a través de camiones cisterna. La canalización subterránea que debe unir la central térmica con la EDAR de Es Castell no será una realidad hasta el próximo verano, y sus obras afectarán a los vecinos de varias zonas.