La lluvia y el frío no pueden con la solidaridad de los segovianos
Cerca de 1.100 personas participan en la VIII marcha y carrera de la Fundación Caja Rural, cuyos beneficios son destinados a paliar las necesidades del Banco de Alimentos de Segovia
Segovia
La música de los segovianos Tocados amenizaba la degustación de los típicos huevos fritos con chorizo con la que se ponía fin a la VIII carrera solidaria de la Fundación Caja Rural.
Cerca de 1.100 participantes tomaban parte, tanto en la carrera que salía a las 10,30 h de la plaza de Los Dolores en la Granja para recorrer 16 kilómetros pasando por la senda verde de Palazuelos, como en la marcha que partía a la misma hora frente a la iglesia de San Millán recorriendo el cinturón verde de la ciudad a lo largo de 8 kilómetros.
Una actividad presidida por el intenso frío y la lluvia que ha estado amadrinada por la atleta Alma de las Heras. Beatriz Serrano gerente de la Fundación Caja Rural reconocía que “otros años hemos tenido mucha suerte respecto al clima, pero pese al frío y la lluvia hemos podido desarrollar tanto como la carrera como la marcha juntando a más de mil personas, muy cerca de esos 1.200 participantes que era el número que nos habíamos marcado. Además estamos muy contentos por poder contar con Alma de las Heras como madrina. Alma es una grandísima atleta de carreras por montaña que tiene seis campeonatos de Castilla y León de esta categoría además de varias medallas a nivel estatal y puede presumir de haber sido también internacional en esta disciplina”
Todo lo recaudado, como en las anteriores ediciones, va destinado al Banco de Alimentos de Segovia que sigue necesitando cámaras frigoríficas y furgonetas preparadas para el reparto de alimentos perecederos para atender a 2.500 personas cada año. Rufo Sanz su presidente reconoce que “es una pena de no poder contar con estos almacenes y vehículos isotermos para poder repartir estos alimentos que muchas empresas nos ofrecen, por lo que en ocasiones debemos hacer el reparto en el mismo día o recurrir a otros bancos que están mejor equipados que nosotros y en los peores casos estos alimentos han de ser enviados a otras provincias por no poder contar con la logística necesaria para su almacenamiento y distribución”.
Pese a lo adverso de la climatología los segovianos han podido disfrutar de una magnífica oportunidad para pasar una mañana en familia haciendo deporte y además colaborar de manera solidaria con el Banco de Alimentos.