La callada y efectiva labor del CSI canario
La SER se adentra para conocer el día a día del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses

REPORTAJE INSTITUTO NACIONAL DE TOXICOLOGIA Y CIENCIAS FORENSES
01:42
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Santa Cruz de Tenerife
Su labor es callada y poco conocida pero se revela fundamental en la resolución de la práctica totalidad de casos. Los médicos forenses son parte del engranaje del proceso judicial en donde las pruebas periciales suponen la diferencia entre un veredicto de culpabilidad o inocencia. Por primera vez, un medio de comunicación se adentra en el corazón del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses en Canarias para conocer de primera mano, cúal es su trabajo que comienza con los requerimientos que soliciten las autoridades judiciales y Ministerio Fiscal. José Antonio Cuellas, director del Instituto apunta a que la visión de la población en general sobre su trabajo, está muy influenciada por las series del CIS. Actualmente el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses junto con el Instituto de Medicina legal son los únicos centros autorizados para colaborar en los procedimientos judiciales y han contribuido a resolver infinidad de casos.