Se acabó la pesadilla (2-0)
El Córdoba puso punto y final a la Segunda División con un partido más o menos digno ante un Dépor superior. Desde hoy solo debe haber un objetivo en mente: Regresar al fútbol profesional

Loureiro pugna con Pedro por un balón / LFP

Córdoba
El Córdoba cerró la temporada con una nueva derrota, esperada en este caso por la entidad del rival y por lo que había en juego. Sin embargo, no fue el peor partido de los blanquiverdes este año. A pesar de jugar con lo justo y de llevar tiempo con problemas de actitud en gran parte del vestuario, los de Rafa Navarro plantaron cara mientras tuvieron fuerzas a un Deportivo que se jugaba el play off de ascenso.
No fue la peor versión de los cordobesistas este año, que ya es mucho decir. Se perdió merecidamente, pero al menos, no arrastraron el escudo como tantas veces esta temporada. Piovaccari rozó el gol en varias ocasiones y el equipo, en general, trató de caer con dignidad.
Por lo demás, fue un final triste. Se ha perdido la categoría en la temporada con el descenso más barato de los últimos años. De haber tenido un poquito más de orgullo y un vestuario más sano, este Córdoba se habría salvado. Pero se ha hecho todo mal, cambios de entrenador incluidos. Todo mal.
La gestión ha sido pésima, pero los fichajes, la planificación y el vestuario, horribles. Ha sido una pena, porque con un poquito más de actitud, las cosas podrían haber sido distintas, pero ya no se puede hacer nada. Solo queda pensar en regresar el año que viene. Resetearse, limpiar el vestuario y poner en marcha un proyecto ilusionante que solo tenga una meta en mente: Ascender. Hace falta un equipo ganador que recupere a la afición y que inicie una nueva etapa en Segunda B, que ojalá solo dure 10 meses. En ellos está.

Jose Antonio Alba
Vinculado a la SER desde 1997, cuando comencé mis prácticas en Radio Sevilla. En 2001 me incorporé a...