Atrapado entre líneas rojas

Bilbao

Daniel García es un economista de 22 años que el pasado 26 de mayo dió la campanada en Labastida ganando con el PP las elecciones locales. Sacó 20 votos y 1 concejal a la todavía alcaldesa en funciones Laura Pérez, del PNV. Pero como esto va de gobernar, no de ganar, García sabe que PNV y EH Bildu pueden quitarle la alcaldía el día 15, y ha tomado la iniciativa. Ideó un gobierno municipal con las tres fuerzas, con reparto de areas y consensos en política municipal. Y el lunes se reunió con EH Bildu y les ofreció dos concejalías: uno de los ediles está muy implicado en el deporte de la localidad, pues la concejalía de deportes; otra es profesora de euskera, pues la de euskera. Una oferta, decía, a dos personas concretas, más allá de las siglas.

El resto es conocido. EH Bildu reventó la oferta al desvelarla ayer. Y el PP desautorizó cualquier encuentro, negocio y diálogo con los abertzales. 

Es una pena concluir que quien actúa como Daniel es un cándido. Pero su partido es preso de sus vetos y lineas rojas, sobre todo, cuando se la pone a otros continuamente, como ahora al PSN en el caso de Navarra.