Voten antes de que sea tarde
La opinión de Juan Miguel Alonso (22/4/2019)
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León
A las puertas de ese fiestón de la democracia del 28 de Abril nos amenazan con dos debates que van a ser la prueba del algodón de la pureza ateniense. Porque la democracia ha devenido en esto: un carro de posverdades, insultos y simplezas patrióticas que ponen al personal a tono para salvar la caza, los toros o la patria, Que siempre es una y trina.
El engendro de la duquesa rubia no es más que el último invento de esa pléyade de retrasaditos con máster en Stanford que han descubierto que crear la realidad es más fácil que transformarla, que aplicar el soma cotidiano en el plasma y las redes es más efectivo que ofrecer soluciones racionales y justas para la mayoría. Porque, al fin y al cabo, a quién cojones le importa la mayoría …..
La comprobación empírica de esta irrealidad democrática es que personajes como Silván o Suarez Quiñones sean candidatos a nada, a no ser que sea a presidir el club de fans de José Luis y sus muñecos. Lo que viene siendo una democracia controlada por vía rectal, ustedes ya me entienden.
Así que, dado que nos han regalado no uno sino dos debates. Véanlos, escuchen con atención, olvídense de las banderas, de las patrias y busquen como enormes pepitas de oro las propuestas sobre la sanidad y la educación pública, sobre las pensiones, sobre el salario mínimo, sobre las becas, sobre la igualdad real, sobre los parados de más de 55 años, sobre los contratos para nuestros jóvenes y luego voten, voten el domingo como si les fuera la vida en ello, porque les va. Y, sobre todo, háganlo con el cerebro, no con los huevos, que es lo que ellos quieren.
Si alguien cree que el voto es gratuito es mejor que no se engañe o pronto descubrirá que puede resultar muy caro. Aunque el domingo no es lectivo, nos vemos en los coles, porque es un día que no conviene pirarse la clase.
