Campaña
Exíjale al candidato que le explique claramente qué va a hacer para mejorarle a usted la vida

Palma
¿Sirven para algo las campañas electorales? Con un 42% de indecisos, según el último CIS, deberían servir. ¿Y los debates electorales? Depende. Suelen plantearse como una confrontación de ideas y programas. Acaban siendo una sucesión de monólogos donde se mezclan propuestas con alusiones personales antes de que el espectador desconecte definitivamente, por muy indeciso que esté.
Todos estamos pendientes de la campaña. Unos por trabajo. Otros, la mayoría, para tener tema de conversación. Y es que no ha aumentado el interés por la política sino el afán de tener los cuatro titulares del día para poder hablar de política sin parecer un astronauta recién llegado de Marte.
Seguramente se ha indignado usted últimamente con algún mensaje publicitario en las redes sociales que critica a su político o partido preferido. O igual lo ha compartido porque cargaba contra el político que más odia. Verá muchos. Es más fácil hacer que los votantes de los partidos rivales no vayan a las urnas que hacer que los nuestros acudan a votar. Triunfa lo negativo. La propuesta en positivo va a la baja. Que se lo digan a Trump. O a Bolsonaro.
Exíjale al candidato que le explique claramente qué va a hacer para mejorarle a usted la vida. Pídale que le emocione sin mentirle. Y que sea él y no un argumentario con zapatos. No va a poder evitar que le llene el whatsapp de mensajes y convocatorias, pero no se lo tome como algo personal: lo hace con todos.
Y si se encuentra con el rostro del candidato en algo parecido a la carátula de una película de Netflix, sepa que es la única manera de que alguien se fije en el cartel. Seguro que pronto encuentran otra.