Profesores con salarios indignos
La opinión de Ángel Santiago Ramos (1/3/2019)
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León
La Universidad es la industria docente e investigadora más importante que tenemos a nuestro alcance en una Comunidad en la que abundan los gestos institucionales que están limitando su crecimiento.
Aprovechando los años de la crisis, la Consejería de Educación ha colocado las tasas universitarias en el grupo de las más elevadas de todo el territorio nacional, teniendo una renta familiar por debajo de la media española, con lo que se limita la igualdad de oportunidades.
Con los gobiernos de la Junta en manos populares han crecido exponencialmente los campus privados, en su mayoría promovidos por organizaciones religiosas, y en los que la excelencia académica ni está ni se le espera. La proliferación y el modus operandi de esta oferta de estudios superiores están perjudicando seriamente la propia sostenibilidad de nuestras universidades públicas en Castilla Y León.
Los recortes presupuestarios alcanzan especialmente al colectivo del profesorado. En estos años se han multiplicado las contrataciones de profesores asociados, de bajos costes, pero no siempre con la suficiencia académica.
Esta misma semana, un colectivo de más 200 profesores docentes e investigadores de la Universidad de León, denuncian una situación laboral discriminatoria. Representan el 20 % del total del profesorado y realizan idénticas funciones que sus compañeros funcionarios, pero la media de su salario anual es de 6000 euros menos.
Los colectivos de profesores e investigadores universitarios más jóvenes vinculados a los campus mediante contratos padecen en general las penurias de salarios y condiciones de trabajo que no estimulan a elegir esta salida profesional.
Sin universidades de calidad se condenan la inteligencia, el conocimiento y la investigación. Y se limita el desarrollo de los pueblos.
