Un pueblo para reciclar
La opinión de Luis Morales
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Hoy por Hoy Andújar (17/01/2019)
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Andújar
Un artículo periodístico de El Mundo en 2013 se refería a este lugar como “un pueblo de usar y tirar”, pero sus posibilidades hoy van mucho más allá.
Hace unas semanas recorría un paraje un tanto insólito, pero relativamente bien conservado, el poblado de La Lancha junto a la presa del embalse del Jándula. Levantado hace casi un siglo apenas tuvo cierto sentido durante unos años, ya que nació con la única finalidad de albergar a los trabajadores y técnicos, además de sus familias, que participaron en la construcción de una gran presa y estación hidroeléctrica en pleno proceso modernizador del general Primo de Rivera.
Desde entonces solo el mantenimiento de parte de sus estructuras ha salvado su poblado principal de la ruina y la desaparición. Su impresionante ermita neorrománica sin igual por estas latitudes, junto con sus chozas y frontón nos hablan de una vida ya en el recuerdo.
Pero más allá de una actitud resignada de un planteamiento consumista conviene reflexionar acerca de alternativas de reciclaje urbano para su explotación. No son pocos los intentos hasta la fecha de poner en valor la sierra de Andújar desde las instalaciones del Santuario de Nuestra Señora de la Cabeza, y su aldea, cuando si bien es cierto es en estos parajes, rodeados de cotos, ganaderías y naturaleza; donde todo adquiere sentido.
Este poblado es un filón turístico incomparable, con un nivel de comunicación y aislamiento adecuado para triunfar como destino en el auténtico corazón de la sierra mirando desde lejos hacia La Cabeza y donde el silencio de la nada solo se rompe con el sonido muy lejano de unas campanas y el atronador ruido del agua y los animales.
- LUIS MORALES