Preocupación por el futuro de las infraestructuras en Santiago
Las cuentas dejan fuera el enlace orbital y contemplan una inversión mínima para el "orbitaliño" y la depuradora
Fomento
Santiago de Compostela
Los Presupuestos Generales del Estado dejan un sabor amargo en Santiago. Las cuentas presentadas por el Gobierno de Sánchez no satisfacen a nadie, especialmente en lo tocante a las infraestructuras. Si bien la A-54 se lleva 27, 3 millones, desaparece de las inversiones el enlace orbital. Es lo que más preocupa al gobierno local, ya que pone un interrogante a la conectividad norte de la ciudad, un compromiso adquirido por Fomento.
El alcalde, Martiño Noriega, ve "más luces que sombras" en estos presupuestos. Noriega recuerda que el proyecto del orbital, que conectará la AP-9, la A-54 y el polígono de A Sionlla. sí aparecía en años anteriores; 13 millones que se quedaron en el cajón. Al regidor no le sirve de excusa que se esas partidas no fuesen ejecutadas.
No es mucho más halagüeña la perspectiva para el conocido como orbitaliño, la concexión de Formarís con la N-550, que recibe una dotación "simbólica". El regidor se muestra más tranquilo respecto al futuro de la depuradora. Son sólo 65.000 euros para 2019, pero entiende que, con el compromiso de inversión plurianual, el proyecto de A Silvouta está asegurado y no se perderían los fondos europeos.
Noriega confía en que los diputados autonómicos consigan introducir mejoras en unos presupuestos cuya perspectiva social sí valora positivamente.
La oposición, incluido el PSOE, también ha mostrado su decepción con lo que estas cuentas significan para Compostela. Para el portavoz del PP, Agustín Hernández, son "preocupantes". El socialista Paco Reyes los califica de "poco satisfactorios". La nacionalista Goretti Sanmartín las interpreta como una muestra de que "Galicia carece de peso politico".
