Mamá
Eneka Iribarren
Bilbao
Día 14 de diciembre. Aun quedan 10 días para navidad, pero ya me encuentro nerviosa. Estoy nerviosa y a la vez triste por todo lo que voy a ver a mi madre sufrir con las sillas vacías. Esas sillas que un dia se fueron, y a dia de hoy están en otro lugar que no es junto a mi familia. Y sufro por ello, porque se, que aunque quisiera, no podría reemplazarlas. Pero sobre todo, me duele tener que ver a mamá sin esa preciosa sonrisa en la cara, esa sonrisa que la llevaba desde el día que me trajo a este mundo. Si, esa misma que me da fuerzas y me ayuda a luchar todos los días con la misma energía y valor que me enseñó a tener entre sus brazos. Porque este año también, vuelvo a sentir la misma inquietud sobre estas sillas y no dejo de pensar: ¿Qué pasará en navidad?