CUPA GROUP abrirá una mina de interior de pizarra en Benuza con reservas para un siglo
Se han empezado las labores de preparación para abrir en un año esta explotación, tras una inversión de cuatro millones de euros
Ponferrada
Cupa Pizarras ha iniciado los trabajos necesarios para la apertura de una mina de interior de pizarra en el paraje de Raniella, en el municipio de Benuza perteneciente a La Cabrera . Se trata de labores de infraestructura necesarias para la apertura de cámaras y galerías de acceso a la capa de explotación de la pizarra, que tienen como objetivo previo calibrar la calidad de la pizarra así como la potencia y dirección de las capas.
Reservas y método de explotación
Las reservas brutas probadas de la nueva mina de interior de pizarra ascienden a tres millones de Tm. de pizarra. La explotación de la nueva mina de interior va a estar basada en el método de cámaras y pilares, "una mina completamente mecanizada y moderna que aunque es la tercera que tiene el grupo, las otras dos ubicadas en Galicia, se convertirá por su envergadura en la más importante", indica el director de Recursos Humanos de Cupa Group, Eliseo López, a Radio Bierzo.
Inversiones previstas
La inversión total prevista para la puesta en marcha de la nueva mina de interior se cifra en cuatro millones de euros, estimándose que entrará en funcionamiento a finales de 2019 o principios de 2020, en función de cómo se desarrollen los trabajos.
Inversión de futuro y empleo para Cabrera
Con esta inversión en la nueva mina, Cupa Pizarras tiene una previsión de futuro de la explotación para más de 100 años, "lo que demuestra una vez más el compromiso de Cupa Pizarras con las comarcas y pueblos donde posee explotaciones, y con una apuesta activa por la creación de riqueza y empleo", asegura el gerente del grupo.
La explotación es anexa a otras dos del grupo: Cantera de Arcas, que es el cielo abierto de pizarra más importante de Europa y Carpisa.
En la actualidad, el grupo da empleo a 2.000 trabajadores dentro y fuera de España, de los que 1.700 están adscritos al sector de la pizarra y de los que 500 dependen de las empresas que Cupa tiene entre el Bierzo y Cabrera.
Según López, la idea es dar prioridad en las contrataciones a la gente de la zona, una apuesta que pude servir de colchón laboral para quienes se ven obligados a dejar el sector minero de la antracita. "Es un importante espaldarazo para la minería de interior", remarca el gerente si además se confirman todos lo parámetros de previsiones sobre la vida de la mina, que "marcará un punto de inflexión" en el sector de la pizarra.