"Situación Asturias" pinta con relativo optimismo a la economía regional
El centro de estudios del BBVA, el "BBVA Research" prevé que en Asturias el crecimiento del Producto Interior Bruto se mantenga elevado, en torno al 2,5% en este año 2018 y al 2,6% en el 2019. Así lo indica el informe "Situación Asturias" que hoy se ha presentado en Oviedo
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/IR2KZJTMLVPSFHGGVQ7HWK5UPY.jpg?auth=354e7c52b368abfefb34ffea108baf6d82eab72936b40d94cefb9797df2cc0a6&quality=70&width=650&height=487&smart=true)
Imagen de la portada del informe / BBVA Research
![Imagen de la portada del informe](https://cadenaser.com/resizer/v2/IR2KZJTMLVPSFHGGVQ7HWK5UPY.jpg?auth=354e7c52b368abfefb34ffea108baf6d82eab72936b40d94cefb9797df2cc0a6)
Oviedo
Según este documento, la economía de Asturias creció un 3,5% en 2017 y moderará su ritmo de crecimiento hasta un 2,5% en 2018 y 2,6% en 2019, y, aunque se observa esa desaceleración, la evolución seguirá siendo positiva.
Con estos supuestos, se crearán unos 15.000 puestos de trabajo entre el tercer trimestre de 2018 y el final de 2019, consiguiendo que la tasa de paro pase del 13,5% actual al entorno del 11%.
Miguel Cardoso, economista jefe para España y Portugal de BBVA Research, confirmaba que, de cumplirse este escenario, en un plazo de 3 a 5 años las grandes ciudades asturianas, Oviedo y Gijón, podrían recuperar el nivel de empleo anterior a la crisis.
El plazo sigue siendo demasiado largo y el coste social muy elevado por lo que el reto en el Principado continúa siendo crear más y mejor empleo.
Los factores que impulsan el crecimiento económico siguen siendo la recuperación del gasto de las familias, el crecimiento de las exportaciones de bienes y servicios, la mejoría del sector de la construcción y de la compra-venta de vivienda y un entorno nacional e internacional relativamente positivo.
En cuanto a los riesgos que podrían amenazar el cumplimiento de estas previsiones, algunos de los cuáles se ven ahora más probables que hace tan sólo unos meses, estarían la situación política nacional e internacional, el incremento de los precios de la energía, la ralentización en el crecimiento del sector turístico, la incertidumbre sobre la política económica (reforma pensiones, crecimiento de los salarios,…) y la aprobación o no de los Presupuestos Generales del Estado.