Los comerciantes de Regalado cambian el recelo por la ilusión
El proyecto presentado por Manuel Saravia es acogido con agrado por los empresarios
Jaime Curiel y Mila Aguado, con el plano del proyecto en la mano, en la calle Regalado / José María Francisco
Valladolid
Las mejoras anunciadas por el concejal de Urbanismo, Manuel Saravia, en la última calle peatonalizada en Valladolid, Regalado, han provocado un cambio en el estado de ánimo de los comerciantes: la sensación de resignación y recelo por la actual situación de la calle se ha transformado en ilusión.
Porque aunque la calle pasó a ser peatonal, la realidad es que la mayoría de los ciudadanos caminan por las aceras puesto que la parte central tiene un pavimento que genera confusión y, además, el paso de vehículos es frecuente, no sólo de los garajes de la calle Regalado sino de algunos conductores que se confunden a la entrada, en el cruce de Cánovas de Castillo.
Jaime Curiel se muestra ilusionado ante la mejora de la peatonalización de la calle Regalado
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Jaime Curiel, presidente de la Asociación de Comerciantes de Regalado, se muestra "ilusionado" con esta mejora que realizará en unos meses el Ayuntamiento de Valladolid. "Nosotros estamos bastante contentos. No es algo que nos impongan; la idea es hacer algo bonito entre muchos colectivos, entre los comerciantes, colegios de la zona, las escuelas de diseño y arte,..."
La representante de Fecosva, Mila Aguado, valora el proyecto sobre las mejora de Regalado
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Mosaicos con colores con una mayor intensidad en los extremos de la calle adornarán esta céntrica vía de la capital vallisoletana. Además, se remarcarán los antiguos cimientos del claustro de Felipe Neri.
"Es importante que se hagan estos diseños, pero hay que estudiarlo y estructurarlo muy bien para que quede algo llamativo", añade Mila Aguado, gerente de Fecosva.
Por cierto, mientras conversábamos con los comerciantes en la calle Regalado -peatonal según la decisión del Ayuntamiento de Valladolid- circulaba el vehículo "multacar" de la Policía Municipal. Eran las 11:30 de la mañana.
