Este Alavés es un líder muy sólido (0-1)
En otro ejercicio de sufrimiento defensivo, se coloca líder de Primera División tras un gol de Tomás Pina en el primer disparo a portería.
Tomás Pina celebra el gol de la victoria en Balaídos ante el Celta de Vigo. / Salvador Sas (EFE)
Vitoria
El Deportivo Alavés sigue de dulce y como guinda a su pastel puede dormir como líder de Primera División la noche del viernes. Y lo hace siendo cada vez más fiel a su identidad. Este equipo parece que no está, pero siempre aparece. Le cede la posesión y el dominio al rival, sabe sufrir y en su primer tiro a puerta se trae los 3 puntos. Pocos equipos tienen tan claro cómo juegan. Y el Alavés es letal jugando a lo suyo.
Con este resumen se puede extractar la victoria en Balaídos. Ante un Celta que fue superior en posesión y ocasiones, pero inferior en lo que realmente importa: el acierto. Pacheco, finalmente titular, estuvo inmenso ante las ocasiones de Iago Aspas, Bufal y Brais Méndez; pero Tomás Pina no perdonó en una jugada de estrategia marca de Javi Cabello, el segundo entrenador.
De salida, el Alavés presionó arriba y llegó al área celeste. Pero a partir del minuto 10, el equipo gallego se adueñó del balón y provocó el sufrimiento defensivo del rival. No se encuentra incómodo el Alavés en ese escenario y menos repitiendo trivote. De hecho, Ibai Gómez envió al larguero el posible 0-2. Por lo pronto, 17 puntos que dan el liderato pero que mandan el descenso a 10 de diferencia.
0- Celta de Vigo: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Roncaglia, Cabral, Júnior Alonso (Hjulsager, 86'); Fran Beltrán (Emre Mor, 62'), Lobotka, Brais Méndez; Dennis Eckert, Boufal (Pione Sisto, 73') y Iago Aspas.
1- Deportivo Alavés: Pacheco; Martin, Laguardia, Ximo Navarro, Duarte; Pina, Brasanac (Wakaso, 75'), Manu García; Ibai Gómez, Jony Rodríguez (Borja Bastón, 92') y Calleri (Sobrino, 73').
Goles: 0-1, Tomás Pina en el minuto 58.
Árbitro: Del Cerro Grande (comité madrileño). Tarjetas amarillas para Laguardia, Cabral, Calleri, Pina y Hjulsager.
