Favores y elecciones

Andújar

De nuevo los andaluces están convocados a las urnas y de nuevo fuera de plazo. Otra vez, un adelanto electoral que responde únicamente a los intereses partidistas de Susana Díaz.

La excusa de la pérdida de apoyos para elaborar y aprobar unos nuevos presupuestos no puede ocultar la campaña mediática a base de dinero público que el gobierno de Andalucía lleva protagonizando meses y haciendo así ver a todos, que las elecciones estaban al caer.

Porque Andalucía funciona así, a base de dinero público pero muy por encima de un concepto de servicio público o derechos sociales sino de algo mucho más perverso, de favor público. Favores hacia estudiantes, autónomos, grandes empresarios, trabajadores y parados. No es un favor sectario, que los habrá también, sino un favor generalizado y la promesa de que solo con ellos ese engranaje de favores seguirá funcionando.

Un supuesto favor que no es tal, porque cualquiera que se hace con el dinero de los demás no lo puede ser por definición. Mientras estos meses la presidenta visitaba numerosos pueblos de nuestra geografía haciendo suntuosos anuncios y recordando esos supuestos favores; se han ocultado enormes incumplimientos con nuestra comarca: especialmente en labores de infraestructuras. Las autovías del Olivar y de Córdoba siguen en el limbo de las promesas eternas; como lo sigue la carretera de Andújar a Jaén cobrándose vidas; como seguimos esperando que haya una apuesta por el Patrimonio Cultural; o un plan realista contra la despoblación o la industrialización más allá del olivar.

Porque la Andalucía conservadora de cuatro décadas de PSOE se merece una pausa, porque con el dinero de los andaluces toca dejar de decir que se hacen favores y hacer progreso. En nuestro voto está la decisión de qué Andalucía nos merecemos para los próximos cuatros años, o en el caso de revalidar el cargo, hasta que a la presidenta Susana Díaz le encajen de nuevo los plazos y las encuestas.

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