Fin al año hidrológico con una media de lluvia muy superior a la de los últimos 25 años

Jaén

Termina el año hidrológico 207-2018, que en hidrología mide las precipitaciones sobre una determinada cuenca hidrográfica y cuyo inicio no coincide con el año natural, ya que por ejemplo en países del hemisferio norte suele comenzar en septiembre u octubre, y lo hace con buenas noticias, ya que después de las abundantes precipitaciones en la cuenca del Guadalquivir ha terminado con un 21 por ciento más de lluvia respecto a los últimos 25 años.

Los 706 litros caídos de media por metro cuadrado en la Cuenca del Guadalquivir han supuesto una ruptura de la tendencia de los últimos cuatro años, en los que las precipitaciones en esta misma cuenca habían sido inferiores a su media histórica, que se sitúa en 584 litros por metro cuadrado. Además, si comparamos los datos de este año hidrológico que termina con el anterior (16-17), las precipitaciones medias han sido un 41 por ciento superiores.

Evidentemente a estos buenos datos ha contribuido especialmente lo lluvioso que fue el mes de marzo, registrándose 300 litros por metro cuadrado de media en la cuenca, lo que supone que haya sido el mes de marzo en el que más ha llovido en los últimos 40 años.

Situación actual

Con las lluvias de este año hidrológico los embalses de la cuenca hidrográfica del Guadalquivir están al 52 por ciento de su capacidad, con más de 4.221 hectómetros cúbicos de agua almacenada. Si se compara con el año hidrológico 2016-2017, hay 1.589 hectómetros cúbicos más, un 19,6 por ciento. Por todo esto, la situación general de la cuenca es de normalidad de cara a garantizar la atención de las demandas de agua para el abastecimiento urbano y el riego a medio plazo. Además, en este sentido y debido a la ausencia de precipitaciones significativas durante el mes de septiembre, el Comité Permanente de la Comisión de Desembalse de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha acordado ampliar la campaña de riego hasta el 15 de octubre para aquellas comunidades de regantes que no hayan consumido las dotaciones aprobadas.