Crónica y vídeos del "Terremoto Sound"

Granada

Haciendo un símil con la reciente actividad sísmica, podríamos decir que el epicentro ha sido el Cortijo del Conde y que ha habido decenas de réplicas a lo largo y ancho de toda la ciudad. Este fin de semana Granada ha sido la referencia musical absoluta de todo el país ya que además de la celebración del Granada Sound y sus actividades paralelas, se han celebrado los conciertos dobles de Los Planetas junto a la OCG y de Pablo Alborán más el de Sergio Dalma.

El pasado viernes a las 17h se abrían las puertas del Cortijo del Conde para dar cabida a los 20000 asistentes que por allí hemos pasado, siendo Colectivo Da Silva, los ganadores del Concurso Emergentes 2018, el primer grupo en hacer vibrar al recinto con su fórmula propia, psicodélica a medio tempo lista para ser disfrutada.

Buena presentación ante un público más generalista que el que suele asistir a sus conciertos. Tras ellos se estrenaba el Escenario Alhambra con el grupo catalán Elefantes, una puesta en escena con toda la banda vestida de blanco impoluto,aunque poco duró ya que debido a la alta temperatura su carismático cantante, Shuarma, pidió permiso al público para poder quitarse la americana. El cenit de su directo tuvo dos momentos álgidos, uno cuando sonó " Que yo no lo sabía" y el segundo con una versión del "Te quiero" de José Luis Perales.

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Conforme avanzaba la tarde y seguía llegando un numeroso público, salieron a escena la superbanda Corizonas, surgida de la unión de Coronas con Arizona Baby y su comienzo no pudo ser más prometedor, un solo instrumental que podríamos decir con tintes lapidianos, si se nos permite la licencia, de 3 minutos y que fue una declaración de intenciones en toda regla.

Piangi con me o Nueva dimensión vital hizo bailar y cantar a los allí presentes y es que ese rock con toques de blues añejo es energía pura, algo lógico si tenemos 4 guitarras y un bajo sobre el escenario. Mención aparte para recordar esa doble batería entre El Meister y su batería habitual.

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Juanito Makande con una puesta en escena con una lona con un ave flamenco, sillas de anea y plantas naturales nos dejaba bien a las claras que íbamos a presenciar. Su ritmo a medio camino entre la fusión y el flamenco es todo un fenómeno de masas y como tal lo comprobamos, in situ, con el primer lleno del día.

Cuando ya había desaparecido casi por completo el sol y con Sidecars demostrando el por qué eran uno de los cabezas de cartel decidimos darle una oportunidad el escenario Negrita, el más pequeño de los 3, con el grupo Rufus T. Firefly y no hicieron si no confirmar que son una de las bandas más en forma del momento con su potente psicodelia y descarga de guitarras eléctricas. Ya casi acabando el concierto, su cantante, Víctor Cabezuelo, nos confirmó que vendrán a Granada dentro de breves fechas.

De regreso a la zona principal asistimos al grupo sueco Mando Diao y su minimalista puesta en escena, con una malla de luces tan solo. Ellos eran una de las novedades ya que por primera vez la organización optaba por traer a 2 estrellas extranjeras. Los suecos no defraudaron en su concierto y con un sonido realmente nítido hicieron moverse a las miles de personas con temas como Gloria o Dance with somebody.

Pasadas las 12 de la noche y con un cumplimiento estricto del horario se presentaron Juan Alberto, Nani, Migue, Andrés y Alonso, recién llegado del concierto de Los Planetas. Niños Mutantes se sabían ganadores tanto por jugar en casa como por su legión de seguidores pero quizás por eso mismo los granadinos dieron uno de los mejores conciertos que se les recuerda o al menos esa era la opinión generalizada que nos trasladó el público. Un setlist donde tuvieron cabida temas como el basado en un poema de Rafael Alberti, A galopar o FGL dedicada a nuestro poeta más universal y donde no faltó Errante, el que es para muchos un himno generacional y que sirvió para encumbrar a Niños Mutantes.

Y sin un instante para el sosiego aparecieron Marc y los suyos, Dorian, con una salva de confeti nada más empezar. Sus reconocibles bases rítmicas electrónicas y grandes éxitos como Verte amanecer, o Arrecife hicieron el resto. El primer día iba llegando a su fin y para despedirnos nos paramos a ver a la pareja de DJ's We are Not djs. Una sesión con unas mezclas frenéticas, que sonara a la vez Queen, Prodigy y Rage against the machine demuestra de los que son capaces el dúo costasoleño. Si además une el gusto musical exquisito con el que seleccionaban los temas, tenemos el punto final perfecto a la jornada.

El sábado pasear por Granada era una delicia, se podía disfrutar de las distintas esculturas que conforman la exposición, Para. Mira. Toca. de Cervezas Alhambra y de los distintos conciertos que arrancaban sobre las 13.30. Según la organización 20000 personas han pasado por el festival y eso se notaba en la calle, con un retorno económico para la cuidad de 10 millones de euros y es que el Granada Sound es mucho más que un festival de música. De nuevo en el recinto con todo listo para ver a Neuman lo que falló fue el sonido aunque Paco tiró de oficio para solventar esa tesitura. Antes de sonar Hell hizo un alegato a favor de las mujeres y la existencia de puntos violeta en este tipo de macroeventos.

Rayden fue el representante de los sonidos urbanos y el que llenó de público el recinto. En una jornada aún más calurosa que la anterior, sus improvisaciones al ritmo de un sampler de Queen, letras cargadas de crítica social y unas palabras en defensa de los refugiados consiguieron unas de las mayores ovaciones de todo el fin de semana.

Desde Murcia venían Viva Suecia, en esta ocasión sin gafas de sol y demostrando que aquellos mimbres de hace apenas un año confirmaban que estamos ante una de las mejores bandas de la actualidad. Tras la intro de Parque Jurásico llegan los sones de Piedad, el primero de una concatenación de temas como Palos o piedras, Permiso o perdón o la lluvia de confeti con su Hemos ganado tiempo. Sin duda esta banda puede llegar a donde se lo propongan porque su techo no se divisa por el momento.

Los sevillanos Full aprovecharon su show para presentar en público, Zombies, que pertenece a su nuevo disco Capadocia, aunque empezaron con el tema de hace dos años, Aullando y que nos sirvió a muchos para descubrir al grupo. Tras ellos y con el momento estelar de Crystal Fighters apenas había un hueco libre frente a estos. I love London con su potentísima base rítmica, consiguió que esas 20000 personas se divirtieran y bailaran, no sabemos si saldríamos en el sismoógrafo local, pero no nos extrañaría.

A modo de resumen podemos concluir que el Granada Sound ha alcanzado en esta séptima edición la categoría de insustituible para nuestra ciudad, ya sea por poder de convocatoria o movilización, por la actividad paralela en la ciudad o por saber crear una mini ciudad de 48 h de vida en la que todo ha funcionado a la perfección. Ya sea por una o la suma de esas características solo podemos decir, larga vida al Sound.