Partidazo del Pucela en Balaídos (3-3)
Supera una entrada muy floja en el partido ( 2-0 en el 9') para firmar un gran encuentro con un empate en el minuto 93 del debutante Leo Suárez. El equipo pudo y mereció llevarse la victoria
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LaLIga
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Valladolid
No pintaba nada bien el partido. Campo difícil, mucho calor... Los peores presagios se cumplieron en la puesta en escena. En apenas 10 minutos, primero Aspas y después Maxi ponían el 2-0 ante la pasividad de los blanquivioletas. Casi nadie en ese momento podría imaginar lo que pasó después.
El Valladolid, acuciado por la necesidad, subió líneas y empezó a controlar el ritmo. Ya fue mejor que su rival en la recta final de la primera mitad. Alcaraz tiró al palo en el 36' y cinco minutos más tarde Plano, uno de los mejores de la tarde, selló con la cabeza un buen centro de Nacho, para poner antes del descanso el 2-1 y meter a su equipo en el partido.
La segunda parte del Valladolid fue espectacular. Fue mejor en llegadas, recuperaciones, posesión y ocasiones, es decir, en todo. Pero cuando mejor se encontraba en el campo buscando de forma descarada en el empate, llegó un nuevo mazazo. De nuevo la categoría incuestionable de Aspas alejaba a los vallisoletanos de la victoria, 3-1 en el 54 de juego.
Lejos de rendirse el conjunto de Sergio siguió creciendo. Otro gran servicio de Nacho fue rematado por Unal, que anotó su primer gol saliendo desde el banquillo. El final del encuentro fue agónico para el Celta. El Valladolid incrementó aún más el ritmo y recogió sus frutos en el 93' con una gran jugada por la izquierda que terminó rematando en el palo contrario el joven Leo Suárez, que acababa de entrar en el campo. Antes Michel mandó el balón al larguero cuando ya se cantaba gol.
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SERGIO TRAS EL EMPATE EN BALAÍDOS
Punto de oro, aunque el Pucela mereció ganar el partido, con un rendimiento coral de un equipo que recibe un chute de confianza.