Un banco para "contar contas"
El llamado banco dos contos poco tenía que ver con la fantasía
Vigo
En la Calle San Sebastián hay un largo banco de piedra que estuvo muchos años escondido bajo la maleza: el conocido como banco de los cuentos. Pero, nos explica Pedro Feijóo en su libro “Camiñar o Vigo Vello”, poco tiene que ver este nombre y este banco con la fantasía, sino más bien con la realidad. “ De feito, este é o banco máis pragmático de toda a cidade, xa que aquí é onde os feirantes botaban as súas contas”, nos explica Feijóo en una nueva temporada de Plató Abierto donde en su sección recorremos el Casco Vello de Vigo. Allí era donde los feriantes se preparaba el dinero para pagar por entrar en la villa en la llamada Porta do Plaer, y donde se cuadraban las cuentas cuando terminaba el mercado, porque este lugar donde se celebraba el llamado Mercado do Pracer, bajo el campo de Granada hasta bien entrado el siglo XX.
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