Salceda rinde culto a los callos

Vigo

También con calor se pueden degustar platos de cuchara y contundentes. Ya están acostumbrados en Salceda que, desde 1993, decidieron convertir A Praza do Concello en un “callódromo” por el que desfilan miles y miles de fieles devotos de tan preciado manjar. En Salceda ya está marcado el primer domingo de septiembre como el último del verano antes de las promesas que todo el mundo hace de “mañana empiezo la dieta”. Más de 20.000 personas desafían el calor para hincarle el diente a las generosas raciones de callos. La macroparty del callo comenzaba a la una de la madrugada en A Praza do Concello. Allí estuvo supervisando la elaboración y animando a los cocineros, el alcalde de Salceda, Marcos Besada que aprovechó incluso para colgar alguna foto en redes sociales. Allí pudo ver como los esforzados cocineros movían 2.200 kilos de vientre de vacuno, 2.400 kilos de garbanzos, 450 kilos de lacón curado, 375 kilos de chorizo y todo esto con un gigante sofrito, unos buenos botes de especias y agua. Una receta tradicional para una celebración gastronómica que, después de esta XXVI edición, aspirará a ser declarada de Interés Turístico Galego. Desde las nueve y media de la mañana la gente ya se acercó hasta A Praza do Concello para degustar los callos mañaneros o para llevarse las raciones y compartirlas después en familia. La gastronomía sigue siendo el plato fuerte de las celebraciones en Galicia. Y todo esto además regado con un buen mencía.