El Màxim Huerta de Barcala
Ayer, el alcalde -como el presidente del Gobierno- se veía en la tesitura de despedirlo y negar que supiera nada de su vinculación con Belmonte o de pagos en B del susodicho
La Columna de Carlos Arcaya | El Màxim Huerta de Barcala | 14/06/2018
00:49
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Alicante
El Màxim Huerta de Barcala.
Tras la moción de censura que dio el gobierno a Pedro Sánchez, el alcalde comparaba el nuevo gobierno socialista con el descontrol que se vió en Alicante con el tripartito.
Pues más paralelismos. Como con Huerta, si ningún medio hubiera dicho nada, Miguel Angel Redondo, ahora, seguiría en el cargo de asesor del PP. Ayer, el alcalde -como el presidente del Gobierno- se veía en la tesitura de despedirlo y negar que supiera nada de su vinculación con Belmonte o de pagos en B del susodicho.
Pero además, el problema del alcalde es que lo sucedido también es el elemento que esperaba la oposición para empezar a darle forma a la sospecha del "belmontazo" o "tamayazo".
De momento, el tema afecta a la credibilidad de Barcala y alimenta las sospechas sobre posibles maniobras del PP durante los días previos a la censura. Ya hay base para construir el relato.
Y por cierto, Nerea Belmonte, una vez consumada la venganza, cada vez parece más la mangoneada del cuento.