Camargo, ¿otra alcaldía en el aire?
La socialista, Esther Bolado, se someterá a una moción de confianza y el PP no descarta la de censura
Pleno en el que fue rechazado el presupuesto. / Alberto G. Ibáñez
Santander
La alcaldesa de Camargo, la socialista, Esther Bolado, se someterá a una moción de confianza, una decisión que adopta el equipo de gobierno de socialistas y regionalistas por "absoluta responsabilidad" al considerar "fundamental" que el municipio cuente con un nuevo presupuesto.
Todo después de que el voto en contra del PP sumado al de toda la posición en bloque junto a Izquierda Unida y el concejal no adscrito Marcelo Campos, tumbara, en el pleno del jueves 11 de abril, los presupuestos municipales de este año. El portavoz popular, Diego Movellán, ha considerado que el Consistorio puede funcionar con el presupuesto prorrogado de 2016 y a través de apoyos "puntuales" por parte de su formación a aquellas iniciativas que vayan en beneficio de los vecinos.
Al tempo ha advertido de que si trata de aprobar el presupuesto "por la puerta de atrás" y "vinculándolo" a una moción de confianza, "se van a cerrar todas las vías de diálogo posible" y aunque "a día de hoy" el PP no ha explorado la vía de presentar una moción de censura, de producirse ese otro escenario, su partido "hablará con todos los grupos".
Bolado ha respondido convocando la próxima semana un Pleno extraordinario para someterse a una moción de confianza vinculada a la aprobación del presupuesto municipal de 2018. Acompañada por el primer teniente de alcalde y concejal de Hacienda, Hector Lavín, ha explicado que han tomado esta decisión "por absoluta responsabilidad con los vecinos", y ha señalado que cada partido tendrá que "poner las cartas sobre la mesa, posicionarse, dejar claro cuáles son sus verdaderos intereses y asumir las consecuencias de sus actos".
Sobre el proceso a seguir, ha explicado que si debatida la moción y ésta no prospera -se necesita mayoría simple-, se iniciará un plazo de un mes para que el resto de los grupos presenten una moción de censura y un candidato a la Alcaldía.
La Corporación de Camargo está formada por 21 concejales, uno de ellos no adscrito, Marcelo Campos, y el registro de la moción de censura necesitaría para ser efectiva 11 concejales más uno si este edil decidiera firmarla, aunque en el pleno para debatirla y aprobarla valdría con el voto de once ediles (mayoría absoluta).
La alcaldesa ha precisado que si transcurrido ese mes después de una hipotética moción de confianza fallida, el presupuesto de 2018, quedaría automáticamente aprobado en el caso de que no se presentara una moción de censura.
