'Economía circular y sostenibilidad, binomio inseparable'
Esperanza Morillo, directora de Comunicación Atlantic Copper
Huelva
'Economía circular y sostenibilidad, binomio inseparable'
Al inicio del mes de marzo la ciudad de Huelva acogía la celebración de las II Jornadas de Industria, Sociedad y Economía Circular, organizadas por el Colegio Oficial de Peritos e Ingenieros Técnicos Industriales de Huelva (COITI) y la Asociación de Industrias Químicas, Básicas y Energéticas de Huelva (AIQBE). El concepto de economía circular no es nuevo para el sector industrial, sino que ocupa un lugar preferente en la gestión de nuestras empresas y además será fundamental en el desarrollo sostenible de los nuevos modelos de ciudades.
Hablar de sostenibilidad es, principalmente, hablar del empleo eficiente de los recursos disponibles y, en esto, la reutilización juega un papel protagonista. Convertir los desechos en materiales reutilizables que puedan desempeñar una nueva función en el proceso productivo es bueno desde el punto de vista de la rentabilidad económica, pero es mejor aún en materia de respeto y cuidado al medioambiente. En ese aspecto, Atlantic Copper lleva años realizando un notable esfuerzo por reciclar y valorizar los excedentes de su actividad productiva, transformándolos en productos con aplicaciones concretas y valor comercial en algunos casos, minimizando la cantidad de residuos finales y disminuyendo el consumo de energía externa.
Como ejemplo de esto último, podemos citar que en Atlantic Copper producimos energía eléctrica a partir de la recuperación del calor que se genera en nuestra Fundición, reduciendo, gracias a esta y otras medidas, el consumo unitario de energía un 28% en los últimos diez años.
Y, precisamente en relación con nuestra actividad, podemos considerar el cobre como uno de los máximos exponentes de la economía circular, pues se trata de un metal que puede refundirse eternamente sin perder ninguna de sus propiedades, disminuyendo de forma considerable la cantidad del mineral que hay que extraer de la naturaleza para poder abastecer su demanda. De hecho, en la actualidad, el 35% del consumo global procede de fuentes de reciclado, lo que contribuye de forma considerable a un menor uso de los recursos naturales.